Los avances logrados con la implementación de la Ley de Víctimas y de Restitución de Tierras así como la adopción de otras medidas fueron destacadas por el vicepresidente Angelino Garzón ayer en la sesión inaugural del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas, en Ginebra, Suiza.
Esta es la primera participación internacional del funcionario tras el incidente cerebro-vascular que sufrió a mediados del año anterior, lo que obligó a su hospitalización por cerca de un mes.
Garzón dijo ante el pleno del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas que “nuestro compromiso es avanzar hacia la construcción de una política pública de derechos humanos. Una política pública integral, con enfoque diferencial y de género, con implementación en el nivel local y regional, elaborada en el marco de un proceso profundamente participativo y con la colaboración de la comunidad internacional”.
En ese sentido añadió que “en 2012 Colombia inició la implementación de una de las leyes más ambiciosas que se han aprobado en nuestro país, la Ley de Victimas y Restitución de Tierras. Esta ley puso al país a hablar de atención, asistencia y reparación integral a las víctimas después de muchos años de tener un Estado y una sociedad que prestaba más atención a los victimarios que a las víctimas de la violencia”.
Dijo también que un año y medio más tarde, todo el marco normativo aprobado ha hecho posible acciones de reparación con enfoque diferencial para mujeres, niños y niñas, población afro, indígena, campesina, personas con discapacidad, personas de la comunidad LGBT, entre otras.
“La Ley ha permitido igualmente avanzar en iniciativas de reparación colectiva con comunidades enteras en regiones profundamente afectadas por el conflicto armado que todavía vive el país. Creemos que esta es una experiencia única, pero estamos abiertos para conocer las experiencias de países que hayan emprendido con éxito la reparación a víctimas y la restitución en medio de un conflicto armado y no en paz, como es el caso de Colombia”.