Los cinco integrantes de la bancada del Partido Verde en el Concejo de Bogotá quisieran ocupar la presidencia de la corporación en este periodo pero de la aspiración a la realidad hay mucho trecho.
Hasta ayer, había dos pesos pesados resueltos a disputarle el cargo a quien se consideraba fijo para ostentar la dignidad: el concejal Antonio Sanguino.
Por un lado el Concejo de Bogotá tiene hasta el 10 de febrero para escoger su nueva mesa directiva. Por otro, la Administración Distrital pone todas sus energías para que el presidente en 2013 sea cercano a sus proyectos fundamentales como el cupo de endeudamiento, la reforma tributaria y las modificaciones del Plan de Ordenamiento Territorial (POT).
De acuerdo a los pactos entre la coalición mayoritaria de oposición al gobierno de Gustavo Petro, le correspondió en el periodo pasado a Cambio Radical, Partido Verde este año, Partido Liberal en 2014 y La U en 2015.
Al concejal Sanguino, no sólo por las denuncias y debates de control político, sino porque tiene amplia experiencia en la corporación, se le daba como fijo presidente. Pero ayer se conocieron las intenciones de Edward Aníbal Arias y José Juan Rodríguez. Los otros dos integrantes de la bancada, María Clara Name y Hosman Martínez, aunque les gustaría ocupar la presidencia no cuentan con la trayectoria, pues este es su primer año en el Concejo.
Hasta el momento los tres aspirantes tienen probabilidades y cualquier movimiento que hagan será fundamental para ocupar el cargo. Almuerzos, desayunos y comidas entre la bancada, los representantes a la Cámara y los senadores están a la orden del día.
De la contienda podría salir Rodríguez porque en 2012 fue presidente de una Comisión permanente y el reglamento indica que no se puede repetir mesa directiva.
Si la anterior hipótesis jurídica se confirma, Rodríguez estaría posiblemente apoyando a Sanguino debido a que ambos pertenecían al grupo político del exalcalde Luis Eduardo Garzón.
Entre tanto, Arias tendría el apoyo de Martínez, ya que también pertenecieron al grupo político que maneja el senador Samuel Arrieta, del PIN. Un factor determinante es que el concejal tiene cercanía con la administración.
La concejal Name estaría definiendo la nueva presidencia del Concejo, aunque los aspirantes están seguros que deberán dialogar primero con el papá, el senador Iván Name, para establecer cómo será el voto de la dirigente.
Tradicionalmente quien obtuvo la mayor votación es quien llega a la presidencia. Así ocurrió con Darío Fernando Cepeda, de Cambio Radical, Celio Nieves, del Polo Democrático Alternativo, o Soledad Tamayo, del Partido Conservador.
Si esta tradición se mantiene, el presidente sería Arias porque le ganó a Sanguino por 500 votos.