Venezuela: Crean sistema de divisas por subasta | El Nuevo Siglo
Martes, 19 de Marzo de 2013

Venezuela, bajo control cambiario desde 2003, lanzará la semana próxima un nuevo sistema de asignación de divisas mediante subasta, destinado exclusivamente a empresas privadas ya autorizadas que necesiten importar, un mecanismo que los analistas ven como una "devaluación solapada".

La subasta estará dirigida a "aquellas empresas privadas con necesidades en términos de importación", explicó en rueda de prensa el ministro de Planificación y Finanzas, Jorge Giordani, precisando que la primera operación se realizará "los primeros días de la semana que viene".

Las subastas se anunciarán y se publicarán sus resultados, pero no habrá "una frecuencia" predeterminada, agregó el responsable.

Además, con el nuevo sistema, el Banco Central cancelará las divisas directamente a los proveedores de las empresas importadoras que participen en las subastas, que ya no "van a manejar el dinero" como hacían en el eliminado mecanismo llamado Sitme, dijo Giordani.

El gobierno abre de esta forma un sistema complementario a la Comisión de Administración de Divisas (Cadivi), hasta ahora el único mecanismo para asignación de dólares para particulares y empresarios, después de la eliminación del Sitme.

El 8 de febrero, el gobierno devaluó el bolívar casi un 32%, al pasar de 4,3 a 6,3 por dólar, y anunció la eliminación del Sitme, un sistema que fijaba otra tasa oficial de 5,30 bolívares por dólar para importaciones no prioritarias y que podía ser utilizado, de forma muy limitada, por la población para algunas operaciones.

Giordani defendió que el objeto del nuevo mecanismo, bajo el nombre Sistema Complementario de Administración de Divisas (SICAD), "no es el tipo de cambio", porque es "una subasta, con una oferta determinada", negando así que se trate de una nueva devaluación implícita del bolívar.

Pero analistas consultados advierten que el mecanismo de subastas implicará la fijación de valores superiores a la tasa de cambio oficial de 6,3 bolívares por dólar, y por lo tanto una devaluación.

"Lo importante será el tipo de cambio implícito, que vendrá definido por la oferta y la demanda en el mercado. (...) Obviamente que va a representar una devaluación de forma solapada.", dijo Jesús Casique, profesor en la filial de la Preston University de Venezuela, a la AFP.

Asdrúbal Oliveros, director de la firma Ecoanalítica, estimó en Twitter que "el gobierno no quiere admitir que el TC (Tipo de Cambio) de la subasta será más alto... Que es una nueva devaluación".

Para el analista Efraín Velásquez la economía venezolana tendrá recursos "que se obtienen a (la tasa de) 6,3 y otros a otro tipo de cambio".

"El tema no es si es devaluación, es si la economía tendrá los recursos suficientes para operar fluidamente. La respuesta a eso es que no. En la medida que los recursos no sean suficientes, el tipo de cambio tiene que aumentar", afirmó a la AFP Velásquez, director del Consejo de Economía Nacional, que asesora al Ejecutivo.

Según este analista, la "volatilidad" del mercado negro de divisas, que existe a una tasa muy superior a la oficial, que por ley no puede ser divulgada, "puede continuar" si las asignaciones de divisas en Cadivi y el nuevo mecanismo no son "suficientes para los requerimientos de la economía".

El ministro de Petróleo, Rafael Ramírez estimó que la estatal PDVSA, que recibe más de 95% de las divisas que entran al país, entregará 41.479 millones de dólares al Banco Central (BCV), que se destinarán a las subastas, pero también a Cadivi y a otras necesidades del Estado.

En 2012, las importaciones venezolanas de bienes superaron los 56.000 millones de dólares. Pero la oferta de divisas por parte del Ejecutivo fue menor: Cadivi entregó 26.000 millones y Sitme 9.000 millones, según cálculos de analistas. El resto, lo importó mayoritariamente el Estado.

El presidente del BCV, Nelson Merentes, estimó que con este nuevo sistema se "está atacando conjuntamente con el Ejecutivo el problema de las importaciones y sobre todo aquellas importaciones que no se han podido satisfacer en tiempo oportuno o en cantidades por Cadivi".

Venezuela es un país altamente dependiente de las importaciones y la escasez de divisas es una de las causas del desabastecimiento cíclico de productos básicos que sufre el país, que contribuye a la vez a una alta inflación, de 20,1% al cierre de 2012, la más alta de América Latina en cifras oficiales.

En las subastas, cuya "transparencia" garantizó el gobierno, podrán participar las empresas importadoras que estaban registradas para Cadivi y Sitme.

Nicolás Maduro, nombrado presidente encargado tras la muerte de Hugo Chávez, anunció el miércoles pasado que este mecanismo complementario beneficiaría también a particulares, pero Merentes explicó que el gobierno va a "seguir trabajando el tema".

AFP.