CRÓNICA. “El sistema de transporte para el que yo trabajo tiene muchas cosas positivas, lastimosamente el usuario en su diario vivir y en su afán de llegar  no se da cuenta”, así destacó aEL NUEVO SIGLO Julio César Ariza, mientras está al volante de uno de los buses de transporte masivo en Bogotá.

Este santandereano quien se enamoró de la ciudad desde que pisó el asfalto bogotano, hoy tiene un motivo adicional para estar feliz y es que el padrón que conduce, a partir del 1º de junio aportará positivamente al medio ambiente de Bogotá.

Masivo Capital incorporó a su flota de vehículos buses Scania que funcionan con gas natural vehicular de fábrica, los cuales son traídos desde Suecia y operarán en la ruta 19-10, acercando a los usuarios del SITP a la estación intermedia Prado, de la Troncal de Transmilenio.

La ruta transita por toda la calle 129 dando cobertura a barrios como Ciudad Jardín Norte y Prado Veraniego y se espera que con estos nuevos buses se amplíe la capacidad de pasajeros además que se mejore la calidad de vida de los usuarios.

A diferencia del rojo y amarillo tradicional, los buses Scania se distinguen por el color naranja y verde como identidad con la naturaleza y además  son los primeros con motor Euro VI (la homologación de emisiones más exigente de la Unión Europea) a gas natural en Bogotá y con ellos se ofrece una solución más limpia y amigable con el medio ambiente para el sistema de transporte masivo SITP,  pues estos buses reducen drásticamente las emisiones de material particulado y óxidos de nitrógeno, los contaminantes más peligrosos para la salud de las personas y principal problema de calidad de aire de la ciudad.

Según la Secretaría de Ambiente, Bogotá fue la tercera ciudad más contaminada de la región, teniendo en cuenta que existen aproximadamente nueve mil buses a diésel, así como desechos industriales y residuos tóxicos. También, la entidad determinó que enero del 2016 fue el mes más contaminado en los últimos tres años, registrándose una polución entre 33% y 45%.

Igualmente, un estudio de la Universidad Nacional de Colombia menciona que reduciendo la polución entre 2010 y 2020 podrían evitarse 21 mil muertes en personas mayores de 30 años y 900 muertes en niños menores de un año por exposición a largo plazo, con esto se obtendrían beneficios económicos cercanos a los seis mil millones de dólares en costos de enfermedad y de más de siete mil millones de dólares en mortalidad.

Beneficios incalculables

“Como conductor me beneficia en una cosa muy importante y es que me dan herramientas para  trabajar más descansado y poder cumplir con mi función más adecuadamente, porque tiene una serie de tecnología que es muy positiva. En salud empezando por la silla, viene adecuada y cumple con los estándares para el conductor, las herramientas de adelante, donde estás trabajando en la cabina son muy grandes”, afirma Julio, quien lleva conduciendo 25 años, 2 de ellos en el transporte masivo.

Otros beneficios ambientales del gas natural vehicular es que su uso permite disminuir elementos activadores del calentamiento global o efecto invernadero como el Dióxido de Carbono (CO2) entre otro tipo de sustancias nocivas para el medio ambiente.

EL NUEVO SIGLO conversó también con Yesid Suárez, gerente de Masivo Capital, quien resaltó que esta idea no había podido ejecutarse antes por la altura de Bogotá, “lo primero es que hace más de 15 años ya veníamos con la idea de vincular vehículos movidos por gas natural. En la ciudad desafortunadamente no se había podido porque los motores que estaban creados hasta hace dos años no generaban la potencia suficiente para movilizarlos a la altura de Bogotá y digo la altura de Bogotá por los 2600 metros, tiene menos oxígeno y la combustión se hace un poco más difícil”.

Así mismo, Suárez indicó que la recarga de cada bus es variable “la autonomía depende de la cantidad de reserva que tenga de gas, alcanzaría para 260 km aproximadamente para los trayectos del día. El padrón es un buen vehículo para iniciar, queríamos incorporarlo en los cerca de 10 mil vehículos del SITP que tiene la ciudad, pero esa posibilidad está abierta, pues es un elemento que no contiene azufre ni contribuyen a la lluvia acida y por eso nos vinculamos en el impacto global”.

 “Esto es un trabajo de mucha gente, el sueño el tesón y el esfuerzo al final se completan. Quedará registrado como un día fantástico para Bogotá. Para mí como extranjero, aunque vivo en esta ciudad sentía vergüenza, hoy se acabaron esas chimeneas, 3 es exactamente la cifra que necesitamos para arrancar. Como ciudadano quiero un aire libre y Bogotá se pone en la vanguardia mundial del transporte público, por eso quiero llamar la atención de sentirnos orgullosos como ciudadanos de esta gran ciudad”, aseguró Alberto Gonzáles, Country manager de gas natural, que para hacer más confiable la operación de los buses, en compañía de Scania Colombia, ofrecerán toda su infraestructura, experiencia, talento humano y recurso tecnológico.

“Bogotá no es una situación fácil de manejar, Bogotá es complicada, pero brinda oportunidades y esta nueva modalidad de conducir un bus a gas, no solamente me aportará en mi trabajo, del cual me siento orgulloso, sino que así los usuarios no se den cuenta por su afán, les aportará para que respiren más livianito”, concluyó Julio.