Además de la falta de cultura ciudadana, trancones, congestiones en las estaciones y portales, robos, poca solidaridad entre usuarios, deficiente frecuencia de los buses, poca presencia de las autoridades, entre otros problemas que enfrenta Transmilenio, ahora hay que agregarle una crisis sanitaria.
Resulta que después que en las redes sociales se hiciera tendencia un video donde una joven hace sus necesidades fisiológicas en pleno bus cuando se movilizaba al lado de una puerta, el concejal Germán García, del Partido Liberal, encontró que el Ministerio del Trabajo le formuló pliego de cargos a Transmilenio por grave situación sanitaria en el sistema.
EL NUEVO SIGLOconoció en exclusiva que el problema por la falta de baños debería ser solucionado por los concesionarios de Transmilenio.
Según García, Transmilenio solo cuenta con 26 baños públicos (13 para hombres y 13 para mujeres), distribuidos en 8 portales y 2 estaciones, para los 2.700.000 usuarios que diariamente hacen uso del sistema masivo, según cifras oficiales del Distrito obtenidas por el cabildante. Esto significa que por cada 103.000 usuarios hay un baño en Transmilenio.
Los datos dejan en evidencia que de las 131 estaciones solo 2 tienen baño: Ricaurte y Bicentenario. Preocupa que el portal Américas, uno de los de mayor afluencia de usuarios, no cuente con servicio de baños públicos. Esto refleja una crisis sanitaria y humanitaria que merece atención inmediata por parte del Distrito.
Pero la investigación va más allá: un recorrido registrado en video por el equipo del concejal García revela que algunos baños para personas en situación de discapacidad están fuera de servicio, como sucede en la estación Ricaurte. Las imágenes prueban además que Transmilenio cobra entre 500 y 600 pesos por el servicio, lo cual resulta insólito teniendo en cuenta que en total solo hay 44 sanitarios y 18 orinales en los 26 baños públicos.
Esta situación sanitaria habría obligado al Mintrabajo a formularle pliego de cargos a Transmilenio por este déficit en el servicio, investigación que inició gracias a una queja radicada por un ciudadano que denunció la falta de baños para empleados en la estaciones.
El concejal García hizo un llamado al Distrito, en cabeza de Transmilenio, para que adelante las acciones pertinentes que permitan solucionar esta crisis por la que atraviesan los usuarios.
Y es que el problema no es solo para Transmilenio, sino para el resto de la ciudad, porque no cuenta con infraestructura de baños en las vías y espacio público mientras el Código de Policía de Bogotá penaliza a los infractores.
En este sentido cae como anillo al dedo el proyecto de acuerdo que exigía que las instituciones ubicadas en el Distrito Capital de carácter público y privado, que atiendan público, deben ofrecer dentro de sus instalaciones el servicio de baños públicos.
La norma que no pasó en el cabildo distrital, establecía que toda entidad que atienda público tales como consultorios médicos, bancos, entidades dedicadas a la intermediación financiera, oficinas recaudadoras de servicios públicos, Cades, Supercades, bibliotecas, museos, parques, coliseos, estadios, plazas de mercado, centros comerciales sin importar su tamaño, cafeterías, restaurantes, teatros y demás recintos que reciban público en forma permanente y masiva.