Esta semana será definitiva para el desenlace de la estación de gasolina El Manantial en la vía que de Bogotá conduce al municipio de La Calera, a 200 metros del Embalse San Rafael que distribuye el 70 por ciento del agua a los habitantes de la Capital.
Los ambientalistas esperan que el Ministerio de Minas y Energía no deje funcionar la estación mientras que los inversionistas tienen la fiesta montada para la inauguración a finales de este mes.
El tire y afloje se inició pocos días después de que se conociera sobre la licencia que le había otorgado Planeación Municipal de La Calera. Alterno a la consultoría jurídica de la Universidad de los Andes, los abogados María Paula Ángel y Pablo Ernesto Medrano radicaron ante el Juez Quinto Administrativo Oral del Circuito de Bogotá, Dayan Alberto Blanco, una solicitud de nulidad contra la resolución de Planeación. Por otra parte, el concejal de Bogotá, Horacio José Serpa, del Partido Liberal, y la Veeduría Ambiental de La Calera interpusieron una acción de tutela para frenar la apertura de la bomba.
Sin embargo, el presidente de Prolub en Colombia, Diego Valdivieso, constructora del proyecto, anunció que luego de culminar las fases de estructura y tanques para el suministro de combustible y tras cumplir con la entrega de los planes de contingencia ante la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) y obtener un certificado del Ministerio de Minas y Energía, en los próximos días comenzarían las operaciones de la estación de gasolina.
En la otra orilla, los ambientalistas esperan en estos días que el Juez Quinto se pronuncie sobre las medidas cautelares que buscan frenar de inmediato las obras de la Estación de Servicio.
Según los Veedores Ambientales, “defendemos los derechos fundamentales a la salud, al agua potable, a un ambiente sano, entre otros, los cuales podrían ser violados por el riesgo inminente que amenaza al Embalse San Rafael por la construcción de la estación de gasolina de la Multinacional Gulf Oil en el predio el Leño, kilómetro 12,5 vía La Calera”.
Entre tanto, Valdivieso dijo que “estamos en un 90 por ciento de avance. Nos queda hacer la parte final de las obras y este mes terminamos. Al terminar debemos obtener un permiso del Ministerio de Minas, un código Sicom, donde ellos verifican que cumplimos con todas las certificaciones requeridas para la operación de estos puntos de venta y con varios requisitos. Apenas tengamos ese permiso comenzamos a operar y eso puede suceder en cualquier momento”.
Frente a las denuncias de los ambientalistas por la compra sin licencia para construir en el predio, Valdivieso señaló que “la empresa es cumplidora de la ley. La estación de servicio inició con el 100 por ciento de los permisos que se requieren para un proceso de estos. Los veedores ambientales quieren que la estación no se construya a toda costa pero no conocen el manejo del combustible”.
Valdivieso insistió en que no existe riesgo de filtración por la construcción de la estación de gasolina a 200 metros del Embalse San Rafael, que surte de agua a Bogotá y varios municipios aledaños.
“Nosotros le damos la tranquilidad a la ciudadanía de que el combustible es bien manejado, la estación de gasolina no va a contaminar el embalse de San Rafael porque son procesos muy seguros”, señaló.
En este sentido, Carlos Uribe, gerente general de UET Ingeniería, señaló que “la estación de servicio de La Calera protege el medio ambiente al tener instalaciones seguras que no contaminan el subsuelo, ni los mantos acuíferos al implementar el programa de doble contención; es decir, doble pared en tanques y tuberías que se complementan con un sistema de monitoreo electrónico con sensores y válvulas contra derrames e incendios”.
Mientras ambientalistas e inversionistas esperan esta semana una determinación sobre la estación de gasolina El Manantial en la vía que de Bogotá conduce al municipio de La Calera, los debates por las licencias estarán a la orden del día.