Grandes disparidades en materia de desempleo durante 2018 se registraron entre las distintas regiones del país, según los análisis de los expertos.
Un estudio realizado por ANIF señala que en materia de creación de puestos de trabajo se destacaron las ciudades del norte de Colombia, frente a las del sur.
Según el análisis, las ciudades del norte del país continuaron registrando los niveles más bajos de desempleo, significativamente inferiores al promedio nacional.
En efecto, durante el período octubre-diciembre de 2017, se destacaron Barranquilla, con un desempleo de apenas un 7,5% y Bucaramanga 8% con registros inferiores al 9,6% del desempleo nacional urbano en las 13 áreas estudiadas.
Dicho desempeño del indicador de desempleo respondió principalmente a la buena dinámica de los sectores de construcción e industria en Atlántico y de los establecimientos financieros y los servicios sociales en Santander.
En contraste, Cúcuta y las ciudades del centro-sur del país mantuvieron las tasas de desempleo más elevadas, evidenciando la persistencia de grandes disparidades regionales, que siguen sin ser resueltas.
Así, durante el trimestre octubre-diciembre de 2017, Cúcuta registró la tasa de desempleo más alta entre las ciudades principales del país, alcanzando un 14%.
En este caso, la elevada tasa de desempleo se explica por la fuerte inmigración de venezolanos hacia Colombia en los últimos meses, lo que ha incrementado la participación laboral por encima de lo que el mercado laboral de la ciudad puede absorber.
Le siguieron Cali con una tasa de desempleo del 10,7%, Manizales 10,5% y Medellín 9,9%, todas por encima del promedio de las 13 principales áreas urbanas 9,6%.
Cabe mencionar que, en esta ocasión, sorprendió el resultado de Pereira, con una baja tasa del 8,2% anual, dado que suele ser una de las ciudades más golpeadas por el desempleo.
Ello responde, en buena medida, a la construcción de obras 4G en la región, que ha aumentado la demanda de mano de obra.
Inflación
El reporte del centro de estudios económicos indica que en materia de inflación, los resultados no fueron muy buenos.
En efecto, en 2017 la mayoría de las ciudades principales registró tasas superiores al techo del rango meta del Banco de la República.
Por ejemplo, Bogotá registró la inflación más elevada del 4,6% anual, 0,6 puntos porcentuales por encima del techo del 4%.
De manera similar, Manizales y Cali registraron una inflación del 4,3%. Tan solo sacaron la cara Barranquilla que registró un Índice de Precios al Consumidor de 3,2% y Bucaramanga donde el costo de vida fue de 3,8%, las cuales sí lograron ubicarse dentro del rango-meta del Emisor.
Los resultados anteriores parecen evidenciar que en el año 2017 ninguna de las ciudades analizadas cumplió la llamada “Curva de Phillips” a nivel regional, que es la relación inversa entre el desempleo y la inflación en el corto plazo.
De hecho, la relación entre ambas variables parece haber sido positiva, pues se presentaron elevadas tasas de inflación acompañadas de altos niveles de desempleo, o la relación contraria.
Por ejemplo, mientras Bogotá y Manizales registraron elevadas tasas tanto de inflación como de desempleo, en Bucaramanga y Barranquilla se observaron bajos niveles en ambas variables.
Lo anterior demuestra que, aunque las estrategias transversales y regionales que ha tratado de adoptar el Gobierno Nacional fueron un paso en la dirección correcta, ello aún no ha dado sus frutos.
Por esto, es fundamental que la nueva Administración de 2018-2022 continúe trabajando en este frente para lograr disminuir esta heterogeneidad en el mediano plazo.