A pesar del compromiso que expresaron ayer en la cita con el presidente de Cámara los voceros de partidos para reorganizar el trabajo en procura de avanzar en la agenda legislativa, lo cierto es que el Parlamento se mantendrá a media máquina hasta la reunión con el nuevo ministro del Interior Fernando Carrillo, en la que el Ejecutivo destape sus cartas en materia de proyectos, que aún no se confirma si será esta semana.
Desde semanas atrás los presidentes de Senado Roy Barreras (Partido Social de Unidad Nacional –La U), y Cámara Augusto Posada (Partido de La U), han conminado al Gobierno para que defina la agenda que tiene previsto presentar a consideración del Congreso en este primer periodo de esta tercera legislatura.
Algo se avanzó en el tema, pues hace unas semanas el antes ministro del Interior Federico Renjifo presentó a los partidos de la Mesa de Unidad Nacional (coalición de gobierno) un esbozo de lo que serán las iniciativas del Ejecutivo, entre las que se cuentan la reforma a las Corporaciones Autónomas Regionales (CAR) y el nuevo Código de Policía.
Sin embargo el revolcón en el Gabinete que realizó el presidente Santos dejó en veremos la concreción de la agenda gubernamental o, por lo menos hacerla conocer de la Unidad Nacional.
El pasado martes al Ministerio del Interior llegó Fernando Carrillo, en lugar de Renjifo, quien pasó al Ministerio de Minas y Energía. Sin embargo desde ese momento está pendiente una reunión del nuevo jefe de la cartera de los asuntos políticos con los partidos de la Unidad Nacional para dar a conocer la agenda legislativa de la administración Santos para lo que resta de este año.
A mediados de la semana anterior en un coctel de bienvenida a los nuevos ministros, Barreras le pidió al Gobierno agilizar la presentación de sus iniciativas. “Hoy el país debe saber que hoy el Congreso tiene una agenda legislativa netamente parlamentaria. Pero sabemos que el Gobierno tiene iniciativas importantes y esperamos que lleguen prontamente”.
Frente a lo cual Carrillo dijo que “vamos a tener un diálogo con el presidente Santos todo el gabinete ministerial, voceros de los partidos, presidentes de los partidos y allí vamos a iniciar esa interacción que será muy fructífera y podría decir que será muy pronto”.
Sin embargo EL NUEVO SIGLO conoció que en la agenda del Presidente hasta ayer aún no figuraba la anunciada reunión en la que en compañía de Ministro del Interior presenten la agenda legislativa del Ejecutivo a los voceros de los partidos de la Unidad Nacional.
Ausentismo
En la reunión que sostuvo ayer el Presidente de la Cámara hubo un llamado de atención porque la última plenaria de la semana anterior tuvo que ser levantada por falta de quórum.
Sin embargo este ausentismo que se empieza a manifestar en la plenaria de Cámara tendría su explicación en varios aspectos que se suman a la ausencia de los proyectos del Gobierno.
En ese sentido el vocero del Partido de La U en Cámara Alfredo Molina señaló, previo a la reunión con el Presidente de Cámara, que “vamos a definir la agenda legislativa, vamos a reorganizar algunos asuntos porque también hay causas que han generado distorsión en la agenda normal: usualmente los martes son proyectos de ley y los miércoles debate, pero como hemos venido con el tema de Defensor del Pueblo (elección), estuvimos con el tema de la Dirección Administrativa (elección), eso alteró mucho el orden del día o de la semana”.
Otro elemento que ha distraído que los parlamentarios se ocupen de la discusión de los proyectos y afectado el quórum es que están citando muchas reuniones de bancada.
“Como Partido de La U aceptamos absolutamente todo lo tendiente a mejorar el trabajo de las comisiones y de la plenaria”.
En cuanto a la agenda parlamentaria también se ha visto afectada por el reajuste ministerial teniendo en cuenta que toma unos días el necesario empalme que debe hace el ministro entrante.
En ese sentido el vocero del Partido Conservador en Cámara Alfredo Bocanegra manifestó que buena parte de los proyectos de origen parlamentario depende del acompañamiento del Gobierno para avanzar. “Salvo leyes que no tengan mayor afectación presupuestal ni comprometan grandes transformaciones, deben estar ligadas al Gobierno nacional o, por lo menos, tener el acompañamiento”.