Con base en una propuesta de la bancada de la colectividad en el Congreso, ayer fue escogido el presidente de la Cámara, Simón Gaviria, como jefe único del Partido Liberal, por la parte de la constituyente de esa organización política reunida en Bogotá.
“El reto es saber guiar este partido a través de la Unidad Nacional. Esta es la posibilidad de tener unidad dentro del partido con todas las tendencias y enaltecer el papel de las juventudes y mujeres”, aseguró Gaviria, que convocó a un “gran congreso ideológico” en mayo para trazar la hoja de ruta de un plan que lleve a las transformaciones sociales.Según el senador Juan Manuel Galán, se propuso el nombre de Gaviria para “que hubiera una cara visible que tenga la responsabilidad del partido con el legítimo voto de los convencionistas”.
“El partido necesita una única figura que sea aquella que vaya a hablar con el Presidente de la República y que nos pueda representar a nivel nacional e internacional”, dijo la representante Victoria Vargas.
Como lo había planteado hace semanas EL NUEVO SIGLO, el nombre que sonaba para esa dignidad era el del actual gobernador de Santander, Horacio Serpa, para lo cual se convocaría una convención en enero o febrero; sin embargo, la propuesta de los congresistas cambió el rumbo de la constituyente.
En todo caso, tras señalar que el Partido Liberal debe “trabajar al lado del presidente” Santos “para lograr los objetivos que se ha trazado su gobierno con la Unidad Nacional”, Gaviria invitó a Serpa, así como a Ernesto Samper y los “los demás expresidentes” a reforzar la colectividad.
El sábado, a nombre del presidente Santos, el ministro del Interior, Germán Vargas, expresó la gratitud del Gobierno Nacional por el apoyo de ese partido a las iniciativas y propuestas del Ejecutivo: “Permítanme hacer extensivo el reconocimiento, en representación del Gobierno Nacional en esta constituyente, a todos aquellos que a lo largo de este primer año, me refiero a la bancada parlamentaria del liberalismo colombiano, han contribuido de manera tan decidida a lo que hoy nadie duda en calificar como una revolución en todas las áreas”.
Cuando faltan pocos días para que termine la legislatura, Vargas le solicitó al liberalismo su respaldo en iniciativas tan trascendentales como la reforma a la justicia, estatutos de participación y juventudes, áreas metropolitanas, regímenes departamentales y municipales, el nuevo Código Electoral, entre otras.
Otros dos discursos muy comentados fueron los de los senadores Armando Benedetti y Juan Fernando Cristo.
Benedetti, que alcanzó su curul con el aval del Partido Social de Unidad Nacional (La U), comentó la polémica por su aceptación a la invitación a estar en la constituyente liberal, señalando que “en realidad es otra cosa lo que preocupa y desvela a algunos dirigentes políticos: la posibilidad de que la invitación y nuestra presencia es éste evento esté abriendo las puertas y estimulando un proceso de reunificación liberal. Estoy en la obligación de asumir públicamente hoy aquí que no se equivocan, que esa posibilidad subyace el acontecer de ésta constituyente”.
“Como ciudadano, como miembro del Congreso y como dirigente del partido de La U, sin esguinces, secretos ni dobles militancias, estoy interesado en que se debata esa posibilidad. No tengo ninguna elaborada decisión sobre el tema. Y es precisamente porque no la tengo que me interesan la reflexión y el debate”, declaró.
Cristo, que fue junto a Gaviria vocero de la colegiada Dirección Nacional Liberal, manifestó que “las ideas que gobiernan no solo son un slogan de campaña. Son una realidad política que hoy los colombianos perciben y frente a la cual tenemos que estar a la altura de las expectativas”.
Para Cristo, “los resultados electorales demuestran que los colombianos se sienten cómodos con el hecho que el presidente Santos gobierne con ideas liberales”.
Y hacia el futuro, Cristo consideró que el Partido Liberal debe avanzar “con un discurso sereno, moderno, coherente y sin estridencias, al cual debemos añadir más propuestas en el campo ambiental, educativo y tecnológico”, con lo cual “podemos seguir conquistando el centro del espectro político colombiano. Un centro decente y progresista en lo político, responsable y serio en lo económico y audaz, concreto y realizador en lo social”.
A insistir en que “el partido debe apostar a la renovación permanente de cuadros, a la búsqueda de nuevas figuras en las regiones, tal como acaba de suceder”, Cristo anotó que la colectividad debe “alejarse de los caudillismos y los ismos más propios del siglo pasado que del actual y que tanto daño nos hicieron en el pasado”.