La polémica en torno a la ocupación permanente de la Plaza de Bolívar por parte de un grupo de simpatizantes del alcalde Gustavo Petro, no para. Crecen las voces que alertan sobre las afectaciones físicas al lugar, que es símbolo y patrimonio cultural, así como problemas sanitarios y de movilidad.

Desde el Concejo se han escuchado alertas sobre el mal uso de la Plaza. Por ejemplo, la cabildante Clara Lucía Sandoval exigió a las autoridades de Policía y entes responsables la pronta recuperación de ese espacio público.

Calificó como un acto irresponsable del Alcalde las convocatorias permanentes a los ciudadanos, sin antes cumplir los requisitos exigidos para utilizar este emblemático lugar. “El Alcalde está acostumbrado a pasar por alto la ley, cuando cualquier persona solicita el préstamo de este histórico lugar, debe hacerlo con más de 20 días de anticipación y cumplir con una serie de requisitos como permisos y planes de emergencia y contingencia, pero en esta ocasión no se exigieron” manifestó.

Agregó que “se han hecho cambuches,  hay personas durmiendo en carpas y, por si fuera poco, cocinan y  hacen fogatas,  ocasionando un deterioro que perjudica este simbólico lugar  de la ciudad…”, advirtió.

El secretario de Gobierno distrital, Guillermo Alfonso Jaramillo, salió al paso de los señalamientos y reiteró que él ha pedido a los ocupantes que desalojen pacíficamente la plaza. Reiteró que la idea no es acudir a la fuerza pero es necesario recuperar el sector. “No somos amigos de usar la Fuerza Pública pero cuando ya se han llenado los requerimientos, se agota la paciencia y no queda otra alternativa”, dijo Jaramillo.

El alto funcionario ya había advertido a los manifestantes que “deben buscar otros sitios, porque al Distrito no le parece adecuado que estén en esta actividad en la plaza pública”.

A la par de lo anterior el Secretario de Gobierno criticó que en otras ocasiones en que se ocupó la Plaza no hubo tanta urgencia y petición para que fuera desalojada. “… Pero ahora que son los amigos de Petro llegan todos los organismos de control”, precisó Jaramillo.