Sigue la discusión por el blindaje jurídico que tendrían los acuerdos de paz en La Habana entre el Gobierno y las Farc, que según éstos convinieron parte de la inclusión en el proyecto de acto legislativo para la paz que tramita el Congreso de la República un artículo que hace que el acuerdo final para la terminación del conflicto y la construcción de una paz estable y duradera constituya un acuerdo especial, en los términos del artículo 3 común a los Convenios de Ginebra de 1949.

Igualmente, el Gobierno y las Farc acordaron que una vez aprobado el acuerdo final se efectuará una declaración presidencial con forma de declaración unilateral del Estado colombiano ante el Secretario General de las Naciones Unidas, citando la resolución del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas del 25 de enero de 2016, pidiendo al Secretario General que se dé la bienvenida al Acuerdo Final.

En este sentido el senador Jimmy Chamorro, del Partido de La U, hizo énfasis en los Convenios de Ginebra de 1949 y lo concerniente al Derecho Internacional Humanitario dentro de los mismos, resaltando la integración entre los convenios internacionales y la Constitución Política Colombiana para el tratamiento de conflictos internos.

Agregó que “la Corte Penal Internacional es respetuosa de las disposiciones nacionales en materia de justicia y que el estatuto habla de los estados concretamente, pero el plebiscito sería un pronunciamiento por parte del pueblo colombiano, entonces sería la decisión de la ciudadanía”.

Finalmente dijo  “que esta iniciativa cada vez es más sólida, tiene razón de ser, obedece a una secuencia que es seria y a unos pasos que nos blindarían internacionalmente”.

No obstante, la senadora Claudia López, del Partido Alianza Verde, enfatizó en el riesgo de haber incluido el que, según ella, es un ‘mico’ en el séptimo debate del Acto Legislativo para la Paz que hace curso en la Cámara de Representantes.

Criticó además la falta de consecutividad legal en el trámite, pues este debate se da a destiempo y denunció que los abanderados de la paz querían hacerle ‘conejo’ al Senado.

“Los acuerdos de paz y el cese de hostilidades, en el marco del conflicto armado, pueden ser parte de un acuerdo especial pero teniendo en cuenta únicamente lo relacionado al Derecho Internacional Humanitario, lo demás es competencia de acuerdos políticos y este aspecto no se establece en los Convenios de Ginebra”, indicó la senadora López.

Por su parte, como es natural el Gobierno defiende el hecho de que los acuerdos con las Farc constituyan un acuerdo especial a la luz de los Convenios de Ginebra de 1949.

Según el jefe negociador del Gobierno colombiano, Humberto de la Calle Lombana, el futuro convenio de paz tendrá la consideración de acuerdo Especial y pasará a formar parte del llamado "bloque de constitucionalidad" colombiano "en sentido estricto y con carácter transitorio".

En tanto que el ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, dijo que "ha quedado absolutamente claro que ninguno de los artículos de este acto legislativo podrá aplicarse antes de que los colombianos refrenden el acuerdo final".