El resultado del crecimiento del Producto Interno Bruto, PIB, en el primer trimestre del año de 2,8 por ciento, confirmó que el freno de la economía no es tan profundo como lo esperaban varios sectores que pensaban en un peor resultado, incluso de una cifra cercana al 2 por ciento.
Sin embargo, algunos indicadores líderes, han empezado a registrar un rebote hacia una tendencia de un mejor crecimiento para los otros trimestres.
Tanto las cifras del sector financiero como el de la actividad comercial e industrial, así como el de las construcciones comenzaron a reaccionar y a mostrar con claridad una tendencia positiva, con lo que se puede vislumbrar un mejor cierre del año en el crecimiento del país.
Sin embargo, la preocupación de algunos sectores es si este mejor comportamiento de algunas actividades se podrá mantener a mediano plazo, o simplemente se trata de un rebote ante las mejores expectativas tanto internas como externas.
La industria, por ejemplo, creció 8,4 por ciento en abril, el comercio lo hizo en 5,7 por ciento, la construcción aumentó 16,9 por ciento, el sector financiero anda bien y ganó 7,82 billones de pesos. Además, el sector de comercio exterior comienza a revertir la tendencia negativa y ya está mostrando resultados alentadores.
Por su parte, el Director del DNP, Mauricio Santa María, dijo que el consumo de los hogares sigue siendo fuerte y aún está creciendo a tasas importantes.
“A esto se suma un tercer punto: la inversión, como porcentaje del PIB, está en 27,5 por ciento, y eso nos pone en una posición fuerte hacia el futuro, en la que la economía colombiana seguirá creciendo a tasas muy importantes”, aseguró.
Indicó que el sector agropecuario está recuperando tasas de crecimiento, lo cual se ha visto confirmado por la evolución de las cifras de empleo en este sector productivo.
Respecto de la meta de crecimiento del PIB para el 2013, reiteró que sigue siendo del 4,5 por ciento.
Un análisis del BBVA señala que un dato positivo que apoyará la recuperación del PIB en el segundo trimestre del 2013 es la desacumulación de inventarios. Esto difiere de los altos volúmenes de existencias que mantenía la economía en el primer trimestre del 2012, fecha en la cual, al contrario de ahora, se iniciaba un proceso de desaceleración. La reducción de los inventarios no fue insignificante. De hecho, determinó que la inversión bruta creciera sólo 3,7%, cuando la inversión fija había crecido 7,2%.
Otros factores que soportarán el desempeño de la demanda privada y externa serán la recuperación económica de Estados Unidos, el mejor comportamiento de las exportaciones industriales a este país y a otros de Latinoamérica, la mayor confianza de los hogares y las empresas, las menores tasas de interés, la consolidación del sector de la construcción por el plan de impulso a la productividad y el empleo –PIPE- y el repunte de la inversión residencial en Bogotá. En particular, sobre ésta última, las licencias de construcción en la capital crecieron 92,6% anual entre enero y abril de este año.
“En BBVA Research mantenemos nuestra previsión de 4,1% para el crecimiento del PIB en 2013, lo cual exige una aceleración del crecimiento a partir del segundo trimestre del año, lográndose tasas superiores al 5% en segundo semestre. Como dijimos más arriba, muchos de los factores de desaceleración del primer trimestre se fueron revirtiendo en lo corrido del segundo trimestre”, sostienen los analistas de la entidad financiera.
Señalan, además, que la producción de carbón regresó en abril a los promedios observados previamente al choque, y las exportaciones de materias primas mostraron incrementos en los volúmenes. Igualmente, las importaciones de consumo y de bienes de capital y las exportaciones de productos industriales mostraron un fuerte aumento.
Conjuntamente, estos resultados, reflejan una reactivación de la demanda interna y los pedidos industriales, mientras que anticipan que se consolidará nuevamente la minería como sector líder en el crecimiento, aunque a tasas más moderadas que en 2010 y 2011.