Una segunda vacante en la Sección Quinta del Consejo de Estado a partir de mayo venidero, cuando se hace efectiva la renuncia del magistrado Mauricio Torres Cuervo, en caso de que el alto Tribunal para esa época no haya elegido un reemplazo, no impediría que esta célula siga sesionando y por ende conociendo de demandas de asuntos electorales, pues el reglamento interno prevé para estos casos designar un magistrado en calidad de encargado.
El martes de la semana pasada, la Sala Plena del Consejo de Estado le aceptó la renuncia al magistrado de la Sección Quinta Mauricio Torres Cuervo, quien estará en la Corporación hasta el 16 de mayo próximo.
El consejero Torres presentó su dimisión el 14 de marzo pasado, argumentando motivos personales y de salud.
El actual consejero llegó al Alto Tribunal desde el 22 de mayo del 2007, en reemplazo de Reinaldo Chavarro Buriticá, quien estuvo en su cargo hasta el 18 de mayo de ese mismo año.
La Quinta es una de las cinco secciones en que está dividida la Sala de lo Contencioso Administrativo del Consejo de Estado, compuesta por cuatro magistrados que se ocupan principalmente de demandas electorales.
Sin embargo, en la actualidad la Sección Quinta solo cuenta con tres magistrados, pues el Consejo de Estado no ha logrado la votación requerida para elegir el reemplazo de María Nohemí Hernández Pinzón, quien dejó el cargo en junio de 2011.
Los tres magistrados que integran esta Sección en la actualidad son Susana Buitrago Valencia, Alberto Yepes Barreiro y Mauricio Torres Cuervo, sin embargo, como se dijo anteriormente, este último dejará el alto Tribunal en mayo próximo.
Como consecuencia y teniendo en cuenta lo demorado que se ha tornado el proceso eleccionario en el Consejo de Estado, se ha propagado la idea de que con la salida de Torres Cuervo la Sección Quinta quedará prácticamente paralizada, pues en ese escenario tendría apenas dos de los cuatro magistrados que la conforman, lo que como es natural impediría votar los diversos procesos que maneja, pues sería imposible lograr la mayoría.
Esta situación sería caótica pues frenaría una serie de procesos que sigue la Sección Quinta del Consejo de Estado en materia electoral, como es el caso del gobernador de Caldas, Guido Echeverri Piedrahita, quien está en vilo en el cargo después de que el 3 de julio de 2012 su elección fue anulada por una decisión del Tribunal Contencioso Administrativo de Caldas, al fallar una demanda de inhabilidad para ocupar el cargo porque su esposa ejerció como Secretaria de Hacienda encargada en la Alcaldía de Manizales durante el año previo a la elección. A pesar de ello, Guido Echeverri se mantiene en el cargo a la espera de los recursos que presentó ante el Consejo de Estado.
Un reemplazo
Una alta fuente del Consejo de Estado le dijo a EL NUEVO SIGLO que la Sala Plena espera en las próximas semanas elegir el reemplazo de María Nohemí Hernández, en todo caso antes de que se haga efectiva la renuncia de Torres Cuervo.
Sin embargo, en el escenario de que esa elección no se pudiera hacer antes de la salida del magistrado Torres, la fuente señaló que “tocaría encargar a alguien porque se rompe el mínimo de la Sección (Quinta) para que funcione”. En ese sentido explicó que “se encargaría temporalmente a alguien”.
Este Diario conoció que la lista que envió el Consejo Superior de la Judicatura al Consejo de Estado para que de allí elija el reemplazo de María Nohemí Hernández ha resultado prácticamente inviable, por así decirlo, pues sus integrantes no han podido ganar la confianza de los magistrados en Sala al momento de las votaciones.
De ser necesario, la persona que sea encargada en la Sección Quinta del Consejo de Estado para completar un mínimo de tres magistrados podría ser un magistrado de Tribunal, un magistrado auxiliar, entre otros.