La Procuraduría General de la Nación, en decisión de primera instancia, suspendió por 10 meses al señor Wilson Camilo Vargas Guzmán, en su condición de profesional especializado adscrito a la Secretaría General de la Unidad de Restitución de Tierras con funciones en el Grupo de Gestión Financiera, quien con su conducta permitió que parte de los recursos asignados para el pago de la nómina de los funcionarios de la Unidad del mes de mayo de 2013 terminaran desviados a diferentes cuentas de terceros particulares.
El fallo señaló que el señor Vargas Guzmán no verificó el archivo plano de la nómina del mes de mayo de 2013 remitido por la Oficina de Tecnologías de la Información antes de enviarlo desde su equipo de cómputo al Portal Empresarial y Corporativo del Banco de Bogotá, utilizando la autenticación escrita en el portal del banco y el dispositivo de seguridad Token y, en consecuencia, envío un archivo modificado con abonos irregulares a cuentas de terceros que no laboraban allí.
Se estableció que en total se giró a 60 personas un total de $320.125.303, “recursos éstos que en su gran mayoría fueron retirados por los beneficiarios antes que la Unidad solicitara a las entidades bancarias el bloqueo de las cuentas y la devolución de los recursos”.
La falta fue calificada por el órgano de control como una falta gravísima a título de culpa grave, por incurrir en falta disciplinaria al no tener el cuidadoso necesario al momento de desempeñar su labor como tesorero en lo referente al manejo de las cuentas bancarias y su custodia, así como en el manejo de equipos informáticos y su seguridad.