La iniciativa de la Concejal de Bogotá, Martha Ordóñez, y apoyada por todos los concejales de la ciudad será firmada hoy por la alcaldesa para que se convierta en Acuerdo de Bogotá.

Este Acuerdo es el primero de este tipo en el país y resulta fundamental para que Colombia se ponga al día con el compromiso internacional de establecer marcos normativos que prohíban y erradiquen el castigo físico como método de educación.
La Cabildante recordó que este ha sido un año de noticias de violencia y maltrato muy duras contra la infancia, donde el castigo físico ha sido protagonista y recordó hechos como el sucedido en Barranquilla donde una mujer golpeó brutalmente a su hija de tres años para castigarla porque tomó un poco de comida sin su permiso; o el caso de Duitama Boyacá, donde una mujer quemaba los genitales de su hijastra de 6 años porque no iba sola al baño; o el caso de Girón Santander, donde tuvieron que extirpar parte del intestino de un niño de 2 años golpeado brutalmente en el estómago por su padrastro como castigo por no llevar pañal; o el trágico caso en la localidad de Suba en Bogotá, donde un padre asesinó a su hija adolescente por estar embarazada, entre otros casos aberrantes.
La Encuesta Nacional de Salud adelantada por Profamilia revela que en Bogotá de cada 10 madres, 7 usan el castigo físico como método de corrección, mientras que de cada 10 padres, 5 recurren a esta práctica.
De la misma manera, la Concejal recuerda que el castigo físico es el inicio en muchos casos de graves situaciones de maltrato y violencia dentro de los hogares colombianos. Las cifras de Medicina Legal reportan un promedio de 14 mil casos de maltrato infantil en Colombia, 38 casos diariamente, de los cuales más del 80 % ocurren en los hogares.