EL REINICIO de operaciones de la Refinería de Cartagena, Reficar, será el factor que impulse la producción de la industria durante este año.
Así lo estima el analista de Corpbanca, Pedro Ospina, en detenido análisis sobre un primer balance sobre la actividad manufacturera.
Señala que aunque la actividad industrial se aceleró en diciembre pasado, comparado con un año atrás, con un crecimiento de la manufactura de 2,08% frente a 1,52% en igual mes de 2013, “las operaciones de Reficar este año, después de la suspensión en 2014, podemos esperar un rebote importante en la actividad de refinación a partir del segundo trimestre o segundo semestre, que a su vez le va a significar a la industria un impulso importante este año”.
Los expertos consideran que la producción industrial podría crecer entre 3% y 5% este año, convirtiéndose en uno de los sectores con mayor actividad.
Indica que las ventas al por menor, de acuerdo con el último dato conocido, se aceleraron en una velocidad de 9,6%, que se compara al alza con la lectura acumulada del año (7,7% anual), también sumamente favorable y mostrando la importancia del sector consumo en el buen comportamiento observado por la economía colombiana y la solidez del gasto de los hogares terminando el 2014.
La confianza del consumidor calculada por Fedesarrollo muestra un comportamiento negativo cayendo en enero por segundo mes en línea hasta las 17,90 unidades, dato bastante inferior al observado un año atrás (27,30 unidades).
Esto implica caídas de 4,50 puntos frente a diciembre y de 9,40 puntos comparado con enero de 2014. También se sitúa por debajo de la media móvil de 12 meses, actualmente sobre las 21,18 unidades.
De corroborarse un cambio en la tendencia de la confianza del consumidor se esperaría una moderación del consumo, teniendo incidencia sobre la demanda interna y el crecimiento económico. En cambio, la confianza de los comerciantes se mantiene alta en niveles cercanos a los 22,7 puntos, cerca de la media móvil de 12 periodos.
Señala Fedesarrollo, que la tendencia estructural del índice continúa siendo decreciente, lo que se evidencia desestacionalizando la serie. Esta confianza de los industriales contrasta con el optimismo mostrado por el Ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, respecto a que la depreciación del peso mejora la competitividad del sector industrial colombiano.
De acuerdo con el investigador, “aunque esto sea cierto para los exportadores no tradicionales en el largo plazo, en el corto plazo no esperamos un repunte importante de los datos del sector industrial, dada la débil demanda por exportaciones no tradicionales colombianas”.
Si a la actividad industrial se le suma la construcción, se convertirían en los verdaderos impulsores del crecimiento. El sector construcción continúa presentando las mayores expectativas para ser el motor en 2015, si bien las edificaciones podrían tender a enfriarse un poco.
En general, el 2015 comenzó con un deterioro de los principales indicadores macroeconómicos respecto al 2014, y aún contra las expectativas iniciales para 2015 con un crecimiento débil de la producción manufacturera, ligeros aumentos en la tasa de desempleo, una acelerada depreciación del peso, aumentos en la inflación por encima del 4%. Por su parte, el precio del petróleo continúa débil a pesar del leve repunte y un debilitamiento adicional del déficit en cuenta corriente.