Todavía no se sabe cuál será el lema de la campaña reeleccionista del presidente Santos. Sin embargo, un periodista de EL NUEVO SIGLO se dio a la tarea de llamar a varios congresistas de la Unidad Nacional para que dieran opiniones al respecto. El eslogan gubernamental del “JMS”, que corresponde a las iniciales del nombre y apellido presidencial, pero que en palabras del Ejecutivo hace referencia a la frase un Gobierno “Justo, Moderno y Seguro” no sería el escogido por los parlamentarios consultados, que en realidad se inclinaron más por frases que llevaran palabras clave como “paz”, “progreso”, “prosperidad” y “terminar la tarea”.

Peros (I)

No están muy contentos en algunas ONG y fundaciones que defienden los derechos de las personas en estado de discapacidad, pues consideran que están siendo “manoseadas” en medio de la polémica formada tras las declaraciones de una líder del MIRA en torno a que no podían subir a la púlpitos de las iglesias de esa congregación religiosa aquellas personas a las que les faltara algún miembro de su cuerpo. Incluso no se descarta que esta semana varias de esas fundaciones emitan un comunicado conjunto en donde advertirán que más allá de la polémica por las declaraciones de la líder religiosa y el coletazo político y judicial que generaron, lo que debe alertarse al país es que la ley 1618 de 2013 está llena de buenas intenciones pero la faltan “dientes” para sea cumplida.

Peros (II)

“… Ahora resulta que todo el país defiende los derechos de los discapacitados, pero a diario nosotros tenemos que estrellarnos con la indiferencia de sectores públicos y privados que no consideran obligatorio cumplir las leyes contra la discriminación y a favor de las personas en condición de discapacidad… ¿Usted sabe la cantidad de tutelas y requerimientos que tenemos que impulsar cada semana para que en un edificio construyan ramplas de acceso o se dé cumplimiento a las normas sobre incentivo al empleo de personas en condición de discapacidad?”, advirtió el líder de unas de estas fundaciones, que pidió la reserva de su nombre.

Sorpresa

La afirmación presidencial en torno a que el mecanismo de refrendación ciudadana de un eventual acuerdo de paz con las Farc podría ser una consulta popular, generó muchos análisis y comentarios, pues hasta el momento se creía que la única vía era citar a un referendo para que los colombianos se pronunciaran en las urnas en torno a qué apoyan y qué no.

Premonición (II)

A propósito del tema, a comienzos de julio del año pasado, el ex viceprocurador José Luján Zapata, en una de sus columnas en EL NUEVO SIGLO, titulada “¿Consulta popular: única vía? (I)”, afirmaba, de modo premonitorio, que varios juristas creían equivocadamente “que el artículo 374, sin una interpretación moderna y lógica de nuestra Constitución, excluye a la Consulta Popular, consagrada en los artículos 103, 104 y 379 de la misma Carta, como medio especial de reforma constitucional…”. Concluyó la columna afirmando que la “Consulta Popular es  un excelente y prácticamente único medio jurídico para refrendar un acuerdo de paz”.