Contrario a lo que se cree, al Gobierno no le resultan de total disgusto las posturas críticas del procurador Alejandro Ordóñez al proceso de paz. Por lo menos así lo indicó una alta fuente de la Casa de Nariño, según la cual los continuos pronunciamientos del jefe del Ministerio Público han servido para medir el nivel de aceptación o rechazo que tendrán dentro de la opinión pública muchas de las concesiones que tendrían que hacerse a las Farc en caso de que acepten firmar un proceso de paz, desarmarse y reingresar a la vida civil. Según la fuente consultada, queda evidenciado que muchos de los peros del Procurador no son compartidos por el grueso de la opinión pública, conclusión que se convierte en un insumo que el Gobierno y su delegación negociadora han ido analizando.
¿Más apoyos?
Y hablando del proceso de paz, semanas atrás causó impacto la declaración del expresidente estadounidense Bill Clinton en torno de que su país podría llegar a apoyar en determinadas circunstancias que, en el marco de un proceso de negociación con las guerrillas que lleve a la paz en Colombia, el narcotráfico pueda ser considerado como un delito conexo al político. Pues bien, la misma idea se le ha consultado por distintos medios a exfuncionarios de Washington, incluso de la DEA, y la postura termina siendo similar a la del exmandatario: se aceptaría si va atada a que la guerrilla se desarma, desmoviliza y renuncia a cualquier nexo con los carteles de las drogas. Hasta el momento no se conoce una postura oficial, pública ni privada, de la Casa Blanca al respecto.
Vía teleconferencia
Para seguir con Estados Unidos, en fuentes cercanas al proceso de paz con las Farc se especula que ese país evalúa la posibilidad de hacer un gesto hacia la Mesa de Negociación entre el Gobierno y la guerrilla en Cuba. Se trataría de permitir que el extraditado y condenado cabecilla subversivo, Ricardo Palmera, aliasSimón Trinidad, pueda participar activamente, vía teleconferencia desde la cárcel, en algunas de las discusiones en La Habana. Como se sabe, las Farc han pedido reiteradamente que Trinidad sea enviado a Cuba, pero el gobierno Obama no tiene pensado acceder a tal petición. Es más, los delegados subversivos han optado por poner en muchas ruedas de prensa una figura en cartón del cabecilla guerrillero para insistir en su solicitud.
Espaldarazo de EPS
La Asociación Colombiana de Empresas de Medicina Integral (Acemi), gremio que reúne a las EPS, y que es presidido por el exministro Jaime Arias, no sólo respaldó el paquete de medidas y decretos anunciados por el Gobierno el lunes pasado, sino que advirtió que “lo que buscan algunos sectores críticos del modelo de aseguramiento establecido por la Ley 100 es la desaparición de las EPS, la abolición de la integración vertical y el pago directo del Gobierno a los prestadores, a través de un gigantesco ente público muy posiblemente politizado, desde donde se controlaría todo el sistema y se harían millones de transacciones de muy difícil control. Esta fórmula, ya discutida en el Congreso, constituye una peligrosa regresión al pasado y llevaría a un enorme retroceso frente a los logros del actual modelo de salud”.