Bogotá, premio de “consolación”

Un excandidato a la alcaldía bogotana le dijo a un periodista de EL NUEVO SIGLO que lo peor que le puede pasar a la capital del país es que termine convertida en una especie de “premio de consolación” o “salvavidas” para quienes compiten por la Casa de Nariño y quedan por el camino en ese objetivo. En charla off the record, señaló que años atrás, como pasó con los casos de Virgilio Barco, Andrés Pastrana o el propio hoy presidente electo Gustavo Petro, ocupar la alcaldía de la capital del país se consideraba un peldaño para llegar al cargo más alto de la nación, “… pero ahora la cosa es al revés: muchos se lanzan a la presidencia para ver si les suena la flauta y cuando fracasan en ese intento, entonces ponen sus ojos en Bogotá… Vea lo que está pasando ahora: en la baraja de posibles candidatos a la Alcaldía el próximo año hay cuatro nombres de excandidatos o ex precandidatos a la presidencia de la campaña que acaba de terminar, para no hablar de varios senadores que se quemaron o no se postularon en marzo, pero que creen que el Palacio Liévano es su nuevo plan B en política”.

Presupuesto, no votos

El Centro Democrático continúa analizando el mapa político y los resultados electorales, incluso algunos dirigentes se dieron a la tarea de comparar la votación de la colectividad en 2018 para Congreso y Casa de Nariño, con lo que pasó en los comicios regionales y locales de 2019 y lo ocurrido este año, en donde es claro que el uribismo tuvo un retroceso muy grave, al perder casi 20 curules en Senado y Cámara. Según trascendió, una de las primeras conclusiones es que la votación del partido perdió mucho terreno en zonas en donde el gobierno Duque ha invertido presupuestos millonarios, sobre todo en la etapa crítica de la pandemia, pero el Centro Democrático no supo capitalizar esa circunstancia política a su favor, como sí lo hicieron otros partidos e incluso el propio Pacto Histórico.

Tampoco se reflejó

Una segunda conclusión, de acuerdo a lo conocido por este Diario, es que en muchos departamentos y municipios en donde el Centro Democrático tiene una alta participación en materia de mandatarios seccionales y locales así como en cabildos y asambleas, la votación del uribismo cayó de forma sustancial. Esta circunstancia llamó la atención en la medida en que se pensaba que la gestión de alcaldes, concejales, diputados y hasta gobernadores debería verse reflejada en los comicios parlamentarios, pero no fue así. Estos dos temas serán analizados con más profundidad en las próximas semanas.

Apoyo y veeduría

El senador de La U, José David Name Cardozo, cuyo partido decidió entrar a la coalición de gobierno del presidente electo Gustavo Petro, afirmó en su última columna de opinión (escrita antes de que se oficializara la decisión de la colectividad) que “… respetamos profundamente la determinación que ha tomado el pueblo colombiano y hacemos votos por un nuevo gobierno que no llegue pensando en retaliaciones, sino, por el contrario, en buscar consensos que logren sumar voces para la construcción de un país de nuevas oportunidades y desarrollo para todos. En mi condición de Senador de la República y como congresista de la Costa Caribe y de las regiones que se sienten en desventaja respecto de las políticas que se originan en el centro del país, respaldaré sin odios ni zancadillas los planes y propuestas que beneficien a los colombianos, así como también haré el control político frente aquellos aspectos de la mecánica estatal que pierdan el rumbo y no sean consecuentes con lo que esperan las mayorías.