De aquello, nada…
Cuatro meses le restan al presidente Iván Duque para que entre al último año de su periodo. Todo hace indicar que la idea que se tenía a comienzos de 2021 en la Casa de Nariño en torno a que al disminuir la amenaza de la pandemia podría empezar a retomarse parte de la agenda prioritaria del Gobierno, sobre todo en cuanto a varios programas bandera, ya no se podrá llevar a cabo, pues la crisis sanitaria continúa agravándose.
Sí pero no
En las toldas de la oposición hay voces que consideran que sería un “error de estrategia política” que la bancada en Senado y Cámara se oponga de manera cerrada a todo aumento de impuestos que se plantee en la reforma tributaria. Según le dijo un parlamentario de ese bloque a un periodista de EL NUEVO SIGLO “… hay una guerra sucia desde la coalición oficialista contra la oposición, diciendo que aquí solo apoyamos el gasto de inversión social pero no queremos aceptar que el Gobierno necesita nuevas fuentes de recursos… Eso es mentira, nosotros sí apoyamos más impuestos, pero que los paguen los grandes capitales, las grandes empresas, que se disminuyan las billonarias exenciones al gran capital que creó Uribe años atrás y, sobre todo, que se disminuya el abultado gasto militar… Pero hasta ahora el Gobierno no quiere avanzar en esa dirección, sino en cargarle la mano a los pobres a través de más IVA a la canasta familiar”.
PIB primer trimestre
En la Casa de Nariño hay certeza en torno a que el primer trimestre de la economía no fue “ni muy malo ni muy bueno”. De hecho, según trascendió en altas fuentes gubernamentales, se confía en que el crecimiento del PIB se pueda acercar a una tasa positiva o sea de máximo -1%. Según el último reporte del DANE, en torno al decrecimiento general de -6,8% en todo el 2020, en el cuarto trimestre del año pasado el PIB registró un retroceso de -3,6%. Es claro que las cuarentenas de enero por cuenta del segundo pico del covid-19 afectaron el desempeño productivo de este primer trimestre de 2021, pero la actividad fabril y comercial, así como el empleo, se recuperaron rápidamente en febrero y marzo, más aún porque la Semana Santa no quedó completa en este último mes, sino que la mitad fue en el arranque de abril.
Acelerar el paso
En corrillos políticos se asegura que el equipo de abogados del candidato presidencial Sergio Fajardo debe tratar de acelerar el proceso penal que le sigue la Fiscalía por incurrir presuntamente en los delitos de peculado por apropiación en favor de terceros agravado y contrato sin cumplimiento de requisitos legales. Si bien es cierto que la defensa del exgobernador antioqueño está a la espera de que el ente acusador radique el escrito de imputación ante la Sala de Instrucción de la Corte Suprema de Justicia, los análisis en las toldas fajardistas señalan que la defensa tiene que moverse rápido para agilizar la etapa probatoria (obviamente dentro de la tesis de la inocencia) y evitar que al candidato le toque afrontar el tramo final de la campaña electoral (diciembre 2021-junio 2022) sub judice, lo que seguramente afectaría sus posibilidades políticas.