Cumbre en Lima
El 26 de mayo, es decir dentro de 13 días, para más señas un domingo, está programada la XIX Cumbre Presidencial Andina, que tendrá como sede a Lima. Aunque la fortaleza del bloque subregional andino ha venido en declive en la última década, incluyendo la salida de la Venezuela chavista, los actuales gobiernos de Colombia, Perú, Ecuador y Bolivia han insistido en querer mantener ese esquema de integración. La próxima cumbre, por ejemplo, fue declarada por el gobierno peruano “de interés nacional”, más aún porque se trata de una fecha muy especial: la celebración de los 50 años de la Comunidad Andina (CAN). De allí que ese domingo se espere la presencia de los Jefes de Estado de los cuatro países. No hay que olvidar que el actual secretario general de la CAN es el excongresista colombiano, Jorge Hernando Pedraza, quien agradeció al gobierno del presidente inca Martín Vizcarra por el estatus que le dio a la cumbre.
¿Nada de Venezuela?
Según Pedraza, la conmemoración de los 50 años es una gran oportunidad para reposicionar a la CAN como un organismo líder en integración regional. “Estamos trabajando por una CAN Siglo XXI, activa, moderna, dinámica y sobre todo cercana a los más de 110 millones de ciudadanos andinos, por quienes día a día trabajamos en temas como facilitación de comercio, migraciones, pymes, transporte, lucha contra la minería ilegal, telecomunicaciones, entre otros”, afirmó. No se tiene previsto, por ahora, que el tema de la crisis venezolano vaya a ser tratado por los presidentes Vizcarra, Iván Duque, Lenín Moreno y Evo Morales, ya que los tres primeros hacen parte del Grupo de Lima que lucha por sacar la dictadura de Nicolás Maduro del poder, pero el cuarto es uno de los pocos aliados que le queda el régimen chavista en el continente, junto a Nicaragua, Cuba y un poco México.
Cifras de Santos
Las cifras sobre pobreza monetaria y multidimensional que reveló la semana pasada el DANE, evidenciando un crecimiento en ambos indicadores, aunque analizaron lo ocurrido entre 2016 y 2018, el gobierno Duque decidió enfocarlas más como un dato crítico más de la ‘herencia’ del mandato de Juan Manuel Santos, pese a que el uribismo alcanzó a estar en el poder los últimos cinco meses del año pasado. Por lo mismo, para el gobierno Duque esas cifras son el punto de partida desde el cual implementar la estrategia de lucha contra la pobreza de su mandato, contenida en el Plan Nacional de Desarrollo aprobado por el Congreso hace dos semanas y que está a punto de ser sancionado por el Presidente de la República. Según el Departamento de Planeación Nacional en esa norma está contenido un plan de choque “sin precedentes” para disminuir la pobreza en sus diferentes dimensiones, con proyección a 2022.
Metas de Duque
Para la entidad, a pesar de que en 2018 la pobreza monetaria cerró en 27%, con un aumento de 0,1 puntos porcentuales frente a 2017 y la pobreza extrema se ubicó en 7,2% frente al 7,4% de 2017, estos cambios no son estadísticamente significativos, lo que indica que la pobreza se mantuvo constante en los dos últimos años. “Por este comportamiento, el Plan Nacional de Desarrollo Pacto por Colombia, Pacto por la Equidad se convierte en la mejor estrategia para acelerar la reducción de la pobreza y sacar a 2,9 millones de personas de la pobreza monetaria y a 1,5 millones de personas de la pobreza extrema”, indicó la directora de Planeación, Gloria Alonso. Incluso, en el Plan hay una política diferenciada para los departamentos de Chocó y La Guajira, que siguen rezagados en metas de disminución de la pobreza.