Fraudes electorales
En el marco de la sesión ayer en la Comisión Primera del Senado, citada para analizar el sistema electoral y cómo se asume este tema en el proyecto del Plan Nacional de Desarrollo, hubo un movido debate alrededor de cómo se perpetran los fraudes electorales en Colombia. Hubo varias denuncias al respecto. El senador Armando Benedetti recordó el caso de Barranquilla en torno a que los listados de jurados de votación que remitieron las empresas a la Registraduría luego se comprobó que tenían muchas inconsistencias, porque al cruzar esos nombres de presuntos trabajadores con los del sistema de seguridad social se verificó que esas personas no laboraban en esas compañías. A su turno, el senador Rodrigo Lara dejó ver que como no había un Código Electoral moderno y eficiente que regulara puntual y detalladamente cómo se tramitaba cada reclamación, prácticamente cada empleado de la organización electoral tomaba decisiones subjetivas sobre cuáles reclamaciones aceptaba y cuáles no, y allí se colaba el fraude.
La denuncia de Roy
Pero la cuestión no terminó allí. El senador Roy Barreras trajo a colación que hace cinco años denunció ante la Fiscalía el caso de una persona que trabajaba para una firma privada de software electoral, que en una casa en un sector popular en Cali adiestraba a más de 40 personas, varios jurados de votación, sobre cómo se les proporcionaría días después un algoritmo que al introducirlo en el sistema de recolección y transmisión electorales permitía irle restando 50 votos a determinados candidatos cada vez que el escrutinio se acercara a un cierto número de sufragios y sumárselos al “candidato-cliente”. Barreras se quejó de que pese a que las pruebas eran tan evidentes la Fiscalía en cinco años no tomó ningún tipo de decisión sobre el caso y el fraude siguió impune.
Hasta ex presidentes
El senador Gustavo Petro también habló duro sobre este tema, indicando que el sistema electoral en Colombia permitía el fraude y se quejó principalmente de que en el Plan Nacional de Desarrollo que está en discusión en el Congreso no hay ningún artículo que permita que el Estado compre y administre el software de recolección, transmisión y contabilización de datos electorales. Incluso denunció que hay expresidentes como dueños o accionistas de las firmas privadas que hoy son contratadas en Colombia para esta labor. De inmediato, la ministra del Interior, Nancy Patricia Gutiérrez, le recordó a Petro y a los demás senadores que cuando se discutió el año pasado el Presupuesto General de la Nación para 2019 no se provisionaron los recursos necesarios para comprar y administrar ese software. También terció el senador Carlos Guevara, que recordó cómo al MIRA en las elecciones parlamentarias de 2015 le quitaron en el escrutinio tres curules en el Senado que solo, después de una compleja demanda, recuperó en el primer semestre de 2018, cuando ya agonizaba ese Legislativo.
La queja del CNE
Las denuncias de los senadores sobre las distintas modalidades de fraude electoral se dieron luego de que el presidente del Consejo Nacional Electoral, magistrado Heriberto Sanabria, pidiera al Congreso y al Gobierno que aprueben en el Plan un artículo que le dé a esa institución autonomía administrativa y financiera. Sanabria dio una voz de alerta en torno a cómo con las actuales herramientas legales y presupuestales al CNE le queda muy complicado garantizar la transparencia de las elecciones regionales y locales de octubre próximo. Explicó, por ejemplo, lo ilógico que resultaba que el CNE solo pudiera declarar los resultados oficiales de la elección al Congreso unos pocos días antes de la posesión del mismo.