Las “revoluciones tranquilas”
El presidente Iván Duque habló ayer en el XX Congreso de la Federación Colombiana de Agentes Logísticos en Comercio Internacional (Fitac). Allí, en un extenso discurso, hizo una descripción de cómo ha evolucionado el país en las últimas décadas y precisó, por ejemplo, que debía reconocerse que Colombia ha sido un país de revoluciones tranquilas. “…Porque este país nunca ha caído en las garras del populismo en el Gobierno. Ha tenido un sistema estable democrático, imperfecto y perfectible, pero estable y al mismo tiempo con condiciones evolutivas que nos permiten a nosotros tener tranquilidad en cómo las normas se van desarrollando”. Y pensar que una de las banderas de campaña del uribismo en la pasada contienda presidencial era la urgencia de acabar con el régimen populista de Santos en los últimos ocho años. Vea pues.
El prurito de los 100 días
Pero no fue la única afirmación del Jefe de Estado que impactó al auditorio. Por ejemplo, Duque aprovechó esta comparecencia gremial para desestimar esa vieja costumbre colombiana de medir a un Presidente de acuerdo a como sea la gestión en sus primeros 100 días en el poder. “Y nosotros llegamos al Gobierno hace menos de 90 días y en menos de 90 días he querido trasmitirle un mensaje a los colombianos. Uno quisiera resolverlo todo muy rápido. Uno quisiera que todos los gobiernos fueran entonces de 100 días, pero no, son de cuatro años, porque las cosas toman tiempo… Si nosotros permitimos que hagamos reformas de fondo en pro de la competitividad pero en pro de la formalización y por ende en pro de la equidad, vamos en la dirección correcta. Y en menos de 90 días que llevamos de Gobierno, yo puedo decirles a ustedes que estamos dando los pasos indicados”.
Las cuentas del IVA
El Primer Mandatario también adelantó en este congreso logístico las bases del proyecto de reforma tributaria que horas más tarde fue oficializada. Por ejemplo, acudió a un ejemplo sencillo para tratar de justificar los cambios en materia de IVA: “Sé que hay unas discusiones que son importantísimas, que se han dado en torno al IVA. Creo que hay que dejar que estas discusiones en el Congreso tomen su curso, tomen su camino… No podemos seguir propiciando impuestos que generan inequidad. Porque las personas de mayores ingresos son las que más se benefician de los excluidos y los exentos del IVA. Entonces la señora de mayores ingresos o el señor de mayores ingresos que va al supermercado, coge su carro, lo va llenando de productos y después llega a la registradora, por concepto de los bienes excluidos o exentos, el Estado termina prácticamente entregándole más de $100.000. Pero para la persona más vulnerable, son como $25.000 o $30.000”.
Nada de “vanidades”
Ya para cerrar, Duque precisó que no era un “hombre de vanidades”, en el sentido de reconocer lo que hicieron otros gobiernos. “…El transporte. Yo planteé durante la campaña electoral que la primera tarea es concluir, concluir, concluir. Este país tiene que acabar con esas, a veces, ejecutorias vanidosas, donde no se reconoce lo que empezó el de antes. Y entonces ciertos proyectos de infraestructura, porque no satisfacen políticamente a quien llega, entonces terminan convertidos en elefantes blancos, porque se les deja de asignar recursos. No. Yo no tengo esas vanidades. Aquí vamos a culminar los proyectos que están en ejecución y vamos a buscar los cierres financieros de los proyectos de 4G que le sirven al país”.