Poco trabajo se vislumbra esta semana en el Congreso, no sólo porque el viernes es festivo sino porque muchos senadores y representantes dedicarán estos primeros días de diciembre a finiquitar todo lo relativo a su inscripción en las listas partidistas para las elecciones parlamentarias. Como se sabe, el próximo 11 de diciembre se cierra el período de inscripción de candidatos y es claro que todos los aspirantes estarán pendientes de su ubicación en las respectivas listas y la conformación definitiva de estas. Además más de un senador y Representante, que en las últimas semanas no tuvo tiempo mayor para la campaña por el exigente remate del ‘fast track’, dedicará estos días más a temas proselitistas urgentes como la definición de su propaganda política en medios, que se permite a partir del 13 de diciembre.
¿Coaliciones sí son viables?
Tras el hundimiento del proyecto de reforma política y electoral en el Senado la semana pasada, es claro que la posibilidad de hacer coaliciones de partidos para respaldar listas conjuntas al Congreso quedó sepultada. Sin embargo, hay quienes consideran que para las colectividades más pequeñas son viables. Esto en virtud de un artículo aprobado en la llamada reforma al “equilibrio de poderes” aprobada en 2015 pero que luego se cayó en buena parte, sobre todo en el capítulo judicial, en la Corte Constitucional.
¿Es aplicable?
El artículo sobre coaliciones que sobrevivió al examen de constitucionalidad sostiene taxativamente que “los partidos y movimientos políticos con personería jurídica que sumados hayan obtenido una votación de hasta el quince por ciento (15%) de los votos válidos de la respectiva circunscripción, podrán presentar lista de candidatos en coalición para corporaciones públicas”. Aunque algunos dirigentes, incluso de la propia Alianza Verde, consideran que la norma no es aplicable por no haber sido reglamentada, otros advierten que el mandato es claro y aplicable sin problemas.
Los números
Si esto último fuer así, hay que tener en cuenta que en marzo de 2014 hubo, para el Senado, un total de 11.672.251 votos válidos, lo que implica que el 15% de ese global electoral es 1.750.837 votos. En esa ocasión por debajo de esa cifra estuvieron Cambio Radical con 996.872 votos; Alianza Verde, 564.663; Polo Democrático, 541.145; Opción Ciudadana, 527.124 votos y MIRA (que no alcanzó curules al no lograr el umbral electoral) con 326.943 votos.
La coalición sería…
Así las cosas, la coalición que ya tienen planteada (aunque el viernes tambaleaba) los partidos Alianza Verde, Polo y Compromiso Ciudadano, con sus respectivos precandidatos presidenciales Claudia López, Jorge Enrique Robledo y Sergio Fajardo, respectivamente, encuadraría dentro de ese condicionamiento, puesto que el fajardismo no tuvo candidatos al Senado en 2014, en tanto que el Polo y los verdes suman un poco más de 1,1 millones de votos. Como ya se indicó en esta Sección, la lista conjunta al Congreso que esa coalición quiere impulsar, para el caso del Senado, aspiraría a sumar más de 1,5 millones de votos, para obtener entre 14 y 15 escaños en la cámara alta en marzo próximo. Sin embargo, todavía no está claro si los tres partidos se decidirán a presentar esa lista conjunta y menos con el rifirrafe del viernes pasado, tras las críticas de López a Fajardo.
Gabinete de bajo perfil
Entre los muchos análisis que se hicieron respecto al accidentado cierre del ‘fast track’ o vía rápida legislativa, la semana pasada, varios senadores y representantes coincidieron en advertir que el papel del gabinete ministerial fue muy deficiente en el acompañamiento y lobby para las distintas reformas. Es claro que no en pocas ocasiones, dijo un senador conservador, el ministro del Interior, Guillermo Rivera, se vio huérfano de apoyo de sus compañeros de gabinete, salvo por las apariciones de los titulares de Hacienda y Defensa, en tanto que el resto de los ministros brilló por su ausencia. La Casa de Nariño tendrá que hacer un balance al respecto y sopesar en dónde estuvieron las falencias.