CAMPANAZO. El senador por la Alianza Verde, ‘Jota Pe’ Hernández, alertó ayer que el proyecto que busca rebajar el salario de los congresistas corre el riesgo de hundirse. Según el congresista, “los senadores ya le cumplimos a Colombia, pero la Comisión Primera de la Cámara de Representantes aún no quiere dar el debate. Quedan tres meses para los dos últimos debates. ¡Representantes cumplan!”. Dicha iniciativa recibió el visto bueno de la cámara alta en agosto del año pasado, incluso con una votación mayoritaria de 84 votos en la plenaria. Desde entonces pasó a consideración de la cámara baja pero el proyecto no ha avanzado, por lo cual ya empezó a correr el tiempo en su contra y asoma el riesgo de hundimiento.
EL PROYECTO. La iniciativa aprobada en el Congreso establece que el sueldo de los parlamentarios tendrá un tope de 25 salarios mínimos legales vigentes. Esto significa, que de los 43 millones que ganaban el año pasado los senadores y representantes se bajaría a 29 millones de pesos, aunque hay que ajustar a cifras de este 2024. Además, se recortaría la prima de servicios. El recorte solo se podría empezar a aplicar a partir de julio de 2026, es decir para el Congreso que sea elegido en marzo de ese año.
LOS PEROS (I). Según lo dijo un parlamentario a un periodista de EL NUEVO SIGLO, en la Cámara el proyecto no ha avanzado por “varios peros”. Señaló que, en primer lugar, hay preocupación entre los representantes porque no se tuvo en cuenta el impacto de la última reforma tributaria (2023) en los sueldos altos y “… a eso súmele que el Gobierno ahora plantea cargarle más impuestos a las personas naturales para descargar la carga impositiva a las empresas”. En segundo lugar, “… no hay claridad sobre lo que implicaría que ese tope de los 25 salarios impacte al resto de la administración pública, ya que el proyecto plantea que se aplicaría también para altos funcionarios del Estado. Nadie ganaría más”.
LOS PEROS (II) La misma fuente indicó que “… la estructuración salarial básica del sueldo de un congresista, que el año pasado estaba en $43.418.537, establece que por asignación básica se pagaban $10.498.210, en tanto que por gastos de representación eran $18.663.490 y la prima de servicios sumaba otros $14.256.837. Al eliminar la prima especial y sus implicaciones en materia de seguridad social y otras cotizaciones, el salario baja sustancialmente pero el ahorro fiscal no sería tan sustancial como muchos creen”.
¿SIN CHANCE? Frente al proyecto de ley que busca que los colombianos puedan portar armas de fuego para ejercer su legítima defensa ante la oleada criminal, un senador de la oposición les dijo a varios reporteros políticos, en una charla informal, que la iniciativa era “políticamente correcta” pero no “va a pasar en este Congreso ni con este Gobierno”.