Nombres en lista
El 2013 arrancará con la incertidumbre sobre el futuro político inmediato de varios dirigentes de primera línea. La lista es encabezada por el expresidente Álvaro Uribe, quien en el primer semestre tendrá dos grandes decisiones que tomar. La primera se refiere a cuál será su estrategia para tratar de atravesársele a una posible campaña reeleccionista del presidente Santos. En este escenario tendrá que definir si busca lanzar un precandidato de su corriente para que pelee dentro de La U por el tiquete de aspirante oficial. Por el momento su principal ficha es el exministro de Hacienda, Óscar Iván Zuluaga, quien viene recorriendo el país hace varios meses y se considera como un precandidato ya en campaña. Sin embargo, Uribe ha puesto sobre la mesa otros nombres, como los del propio vicepresidente Angelino Garzón o la exministra Marta Lucía Ramírez.
Segunda gran decisión
Y la segunda gran decisión que tiene pendiente Uribe está referida a si lanzará una lista propia al Senado para los comicios de 2014. Hasta el momento no hay nada claro al respecto, pese a que en los últimos meses se ha especulado mucho sobre los posibles nombres que harían parte de esa posible plancha, que se lanzaría a nombre de un movimiento denominado Centro Democrático (ya la palabra “puro” ha sido descartada) y que, seguramente, se respaldará en firmas, que serían recolectadas promediando el año entrante. Y de esta segunda decisión se deriva otra quizá más importante, establecer si el exmandatario al fin de cuentas encabezará la lista, pues está claro que si su nombre figura como candidato al Senado el arrastre electoral de la misma sería mayor.
El dilema
Sobre ese dilema en torno de si Uribe aceptará encabezar la lista todavía persisten varias dudas. Una primera de tipo jurídico, pues hay quienes consideran que si el expresidente llega a una curul en el Senado, de inmediato perdería su fuero penal de exmandatario, lo que significa que podría ser juzgado por la justicia ordinaria y no, como su rango de ex efe de Estado lo exige, por la Comisión de Investigación y Acusación de la Cámara de Representantes. A este respecto, ya hay conceptos de expertos constitucionalistas que sostienen que el fuero es permanente para Uribe tratándose de todos los procesos referidos a su actuación como Presidente de la República o con ocasión de esas funciones.
Otra duda
La otra duda respecto a si el exmandatario se lanzaría al Senado gira respecto de cuál puesto ocuparía dentro de la misma. Para los más entusiastas de la idea de que el exmandatario se postule a una curul, lo ideal es que él encabece la lista de candidatos y que ésta sea cerrada, es decir, que no tenga voto preferente. Sin embargo, hay congresistas y dirigentes que consideran que Uribe deberá estar al frente de la lista pero que ésta tendría que ser de tipo preferente, es decir, que las curules que se logren en las urnas sean asignadas de acuerdo con el número de votos que obtuvo cada candidato individualmente. Esto se haría con el fin de evitar que la plana mayor del uribismo acuda a la táctica del “bolígrafo” para señalar quiénes irían en la parte alta de la lista y, por ende, tendrían más opción de lograr un escaño en el Senado.