Movida táctica
El imprevisto anuncio de las Farc el martes pasado, en el que por primera vez en la historia reconocen que han sido victimarias, pues hasta el momento sus voceros en La Habana decían que la guerrilla era “víctima” del conflicto, no fue gratuito. Según un exalto comisionado de Paz a la subversión le impactó en forma grave los campanazos dados por la fiscal de la Corte Penal Internacional, Fatou Bensouda, en sendas cartas a la Corte Constitucional, en donde indicó que hay límites en la legislación transicional de paz, sobre todo en lo relativo a que los autores de delitos graves y lesa humanidad deben no sólo reconocer a sus víctimas y repararlas, sino pagar un mínimo de pena.
La CPI ahí…
De acuerdo con la misma fuente, que habló bajo la condición del anonimato, “pues en esto hay que entender, como pasa con los expresidentes y los presidentes, que cada comisionado tiene su cuarto de hora”, las Farc parecen empezar a entender que si bien en la Mesa de Negociación sólo hay dos partes sentadas, hay una tercera que aunque no haga presencia física todos los días, sí tiene unos inamovibles que no se pueden obviar por más consenso que haya entre Gobierno y subversión. “Esa es la CPI”, dijo el exalto comisionado.
Política de corazón
La afirmación presidencial en torno de que su “corazón me está, como dicen, impulsando a la reelección”, generó más de un comentario y chascarrillo ayer en los pasillos del Senado y la Cámara. Por ejemplo, un veterano congresista conservador dijo que “el anuncio de Santos casi le causa un infarto al uribismo”. Otro parlamentario indicó que no dejaba de ser paradójica la mención al tema del corazón en este pulso por la reelección, dado que fue precisamente Álvaro Uribe el mandatario que hizo del lema “mano firme, corazón grande” el leiv motiv de su primer mandato y la campaña para el segundo. “… Lo que se evidencia es que hay corazones uribistas y corazones santistas”, puntualizó.
Va que va…
La permanencia de Luis Carlos Villegas al frente de la ANDI sería apenas por pocas semanas. Si bien su período al frente del principal gremio económico del país vence en marzo próximo, es claro que su designación como embajador de Colombia en Estados Unidos cambió todo el panorama. Incluso, se dice que hay urgencia de tener al embajador titular en Washington, pues éste debe preparar todo lo relativo a la cumbre entre los presidentes Santos y Obama al cierre del año, en donde se prevé -el tema más importante- que ambos países aterricen en objetivos y programas concretos el cambio tantas veces prometido en la agenda bilateral.
Y no apareció…
A propósito del artículo publicado esta semana por EL NUEVO SIGLO respecto de las muchas décadas en que un costeño no ha logrado llegar a la Presidencia de la República, un senador de esa región indicó que hace año y medio la situación era muy distinta, pues todos en Barranquilla y otros departamentos de la zona norte daban por seguro que el entonces saliente alcalde de la arenosa, Alejandro Char, iba a ser, como mínimo, precandidato a la Casa de Nariño, pero hoy no asoma por ningún lado en esta contienda.