MUCHO OJO (I). Con la llegada a Colombia, el martes pasado, del exlíder paramilitar Salvatore Mancuso, designado por el gobierno Petro como “gestor de paz”, algunos expertos consideran que se corre el riesgo de que las bandas criminales, como el ‘Clan del Golfo’, ‘Los Pachenca’ y otras de orden regional, que tienen origen claramente en antiguos grupos de autodefensas pero hoy están dedicadas al narcotráfico, la minería ilegal y otros delitos, traten de unirse en una nueva especie de ‘confederación paramilitar’, en busca de vocería fuerte y de bloque para presionar más beneficios políticos y jurídicos si se desarman en una negociación con el Gobierno.
MUCHO OJO (II). “… Mire, veo tres problemas con el tema de Mancuso… El primero, que no está claro cuál será su papel de ‘gestor de paz’, si es obvio que Eln ni los grupos derivados de las Farc lo aceptarán como interlocutor… Y creo que el ‘Clan del Golfo’ y ‘Los Pachenca’ no le van a derivar la vocería fácilmente, menos estos últimos que operan en la Sierra Nevada y tienen un proceso ya andando… En cuanto al ‘Clan del Golfo’, ido ‘Otoniel’ y la antigua cúpula, pocos de los nuevos jefes son contemporáneos de las épocas de Mancuso y las AUC… No hay que perder de vista que fue extraditado en 2008 y hay mucho recambio en las cúpulas criminales desde entonces, porque han muerto muchos de los que mandaban hace dos décadas”, precisó un experto en el tema de la evolución del fenómeno paramilitar en Colombia y exasesor de un proceso de desarme en su momento.
MUCHO OJO (III). Agregó la fuente que “… el tema Mancuso tiene otro problema: se está politizando… No pocos dicen que el Gobierno lo trajo para que enfile baterías contra el uribismo y el propio Uribe, quien extraditó a toda la cúpula de las autodefensas en 2008… No olvide que líderes y senadores de la izquierda llevan años viajando a las cárceles de Estados Unidos para buscar testimonios que liguen a Uribe con el paramilitarismo… Este caso de Mancuso es parecido a la deportación de (Aída) Merlano el año pasado desde Venezuela a Colombia… Muchos dijeron entonces que la idea del Gobierno era afectar a la casa Char en la antesala de las elecciones regionales y la pelea política por el Atlántico”.
MUCHO OJO (IV). Por último, de acuerdo a la fuente consultada, “… no se puede dejar de lado que el proceso a Mancuso ha sido una ‘papa caliente’ para la justicia ordinaria, la jurisdicción de Justicia y Paz y hasta para la propia JEP (Jurisdicción Especial de Paz), la misma que en estos momentos está bajo ataque crítico de la cúpula de los exFarc, en precisos momentos en que se producen las primeras sanciones propias contra mandos militares por ‘falsos positivos’, como la de un general que tendrá que reparar sembrando árboles en Sumapaz… Ojo a este escenario y lo que impactará en el aún incierto marco jurídico de la ‘paz total’”.