Ecos de la encuesta (I) | El Nuevo Siglo
Miércoles, 27 de Febrero de 2013

No fueron pocos los ecos de la última encuesta Gallup en la que la imagen presidencial sigue de capa caída, al punto que por primera vez en la última década la percepción negativa (47%) supera a la positiva (44%). Una alta fuente de la Casa de Nariño indicó que “… era previsible que a medida que se avanzara en el proceso de paz la imagen del Gobierno decayera, puesto que la etapa de negociación es improductiva bajo un modelo como el pactado con las Farc… Cualquier experto en resolución de conflictos le puede decir que cuando se negocia bajo el modelo de nada está acordado hasta que todo esté acordado, el proceso y respaldo público sufre un desgaste progresivo que, al final, en caso de firmarse un acuerdo, se revierte en cuestión de días o pocas semanas… Buscar la paz tiene sus riesgos y los que saben de este tema así lo entienden”.

 

Ecos de la encuesta (II)

 

La misma alta fuente explicó que “… incluso el apoyo al proceso de paz no ha bajado tanto como inicialmente se temió… En octubre estaba en 72% y ahora, cuatro meses después, y tras el desgaste normal así como los hechos de orden público y el caso de los secuestros, sólo bajó un 10% el apoyo de la opinión pública en las encuestas… Hay muchos prendiendo las alarmas sobre una crisis insalvable o una ruptura a la vista en poco tiempo… Recuerdo el proceso en el Caguán, que un día estaba en rojo en las encuestas y al otro día, con un solo hecho de paz o incluso después de las crisis en que estuvo a punto de romperse todo, los porcentajes subían instantáneamente”.  

 

Ecos de la encuesta (III)

 

Los más contentos con la encuesta Gallup fueron los allegados al vicepresidente Angelino Garzón, no sólo porque el segundo a bordo se confirmó como el dirigente colombiano con más alta favorabilidad, sino porque se confirma que el vallecaucano continúa siendo la figura más rutilante del Gobierno. Es más, en los corrillos políticos santistas se analizaba ayer que el Presidente debería insistirle a Garzón que reconsiderara su postura de no volverse a postular en 2014. Incluso, se decía que para lograr que el Vice aceptara ser su fórmula en la campaña reeleccionista, Santos tendría que asegurarle a Garzón una mayor participación y protagonismo en un eventual segundo mandato, matriculándole uno o dos ministerios de primer orden o descargándole una misión en lo social o de paz con mucho margen de acción.

 

Ecos de la encuesta (IV)

 

Paradójicamente en las toldas del uribismo también se hacían cábalas ayer en torno del papel que podría jugar o no Garzón en la próxima campaña electoral. “… Ahora que estamos hablando de encuestas sobre escenarios hipotéticos sería bueno que se hiciera una donde se midiera única y exclusivamente a Santos y Garzón, para ver quién ganaría… La semana pasada ya (el exdirector de la Policía, general r.) Naranjo le ganaba en una encuesta a Santos, pero hoy Garzón supera en favorabilidad a Naranjo y bien podría tener más ventaja sobre el Presidente que la que tiene Naranjo…”, precisó uno de los dirigentes más cercanos al expresidente, quien habló a condición de no revelar su identidad.