Un grupo de parlamentarias trató de hacer un balance de la llamada “bancada de mujeres” en el tramo de la legislatura que terminó la semana pasada. EL NUEVO SIGLO habló con una senadora al respecto, quien, no sin antes pedir la reserva de su nombre, para “no crear polémicas innecesarias”, consideró que la función de las legisladoras no debería dirigirse a presentar más proyectos de ley y de acto legislativo “con enfoque de género, pues la normatividad colombiana ya es muy extensa al respecto, sino a vigilar y pedir explicaciones sobre por qué las leyes para proteger a las mujeres y niños, así como para evitar la discriminación, no se aplican como debe ser”.
División estudiantil
Algunas de las organizaciones estudiantiles están divididas entre los sectores que consideran que se debe apoyar sin excepción la ley que aprobó el Congreso para ampliar la capacidad de vigilancia, intervención y sanción del Ministerio de Educación sobre las instituciones de educación superior, y aquellos que consideran que la norma lesionaría la autonomía universitaria. La división por ahora no tiene mayor eco externo, pero se prevé que sí habría repercusiones en febrero, cuando se reanuden las clases en los campus y los grupos a favor y en contra de la nueva ley (una vez sea sancionada por el Presidente de la República) traten de ejercer presión ante la Corte Constitucional, que revisará la exequibilidad de la norma.
Reparar escenarios
A propósito de la final del fútbol colombiano en sus distintas categorías, trascendió que el próximo año varios congresistas se unirían para impulsar una especie de “ley de estadios” que tiene como propósito crear un mecanismo normativo que direccione recursos del nivel nacional para la recuperación de muchos de estos escenarios deportivos que presentan falencias estructurales, de equipamiento y logísticos.