Respiro (I)

Un respiro de alivio muy profundo significó para no pocos exaltos funcionarios, entre exministros, exdirectores, exgerentes y muchos de quienes ocuparon cargos públicos directivos en el pasado, la decisión días atrás de la sala plena virtual de la Corte Constitucional en torno a revocar un fallo del Consejo de Estado que había determinado una acción de repetición en contra del exfiscal general Luis Camilo Osorio por la declaratoria de insubsistencia de un funcionario. Según se informó, el alto tribunal encontró que en este caso no se cumplieron los requisitos para que la máxima instancia de lo contencioso administrativo ordenara a Osorio “devolver los dineros dentro de un proceso de repetición” producto de una condena contra la Nación por el despido de un empleado de la entidad que se consideró no ajustado al ordenamiento jurídico.

Respiro (II)

“… El fallo es clave para muchas personas que, como yo, ejercimos altas labores en entidades del Estado y llevamos años empapelados por decisiones de despidos de personal sobre las que no tuvimos la mínima injerencia y que tenían procesos internos en las entidades, con claros responsables de los temas laborales, que tomaban decisiones sobre las que los directores no estábamos al tanto, e incluso firmaban jefes de sección y los secretarios generales… Pero aun así los que terminamos envainados y con nuestros patrimonios en riesgo, incluso sin poder poner ningún bien a nuestro nombre por largos años, somos los que estábamos de directores, gerentes, ministros o presidentes de entidades… Eso es absurdo y lo tiene a uno años después de salir del cargo dando explicaciones y de despacho judicial en despacho judicial… Por eso muchos no volvemos a la función pública”, precisó un exalto funcionario que lleva años ‘encartado’ con procesos de repetición a partir de decisiones de la Contraloría.

Respiro (III)

¿Qué determinó la Corte que significó un respiro para muchos de estos ex altos funcionarios? Según el alto tribunal, en el caso específico de Osorio se encontró que, según lo señalado por el artículo 90 de la Constitución, en este tipo de procesos se debe probar que la conducta del funcionario contra el cual se pretende la restitución de lo pagado fue intencional o con culpa grave. Esto, según la Corte, no ocurrió en el caso del exfiscal. La tesis fue reforzada por otro fallo sobre una Gerente de un hospital que fue condenada en acción de repetición por el despido de un subalterno de libre nombramiento y remoción. Aquí la Corte encontró falta de proporcionalidad de la condena, porque frente a una expectativa de estabilidad laboral de cuatro meses por afectar la Ley de Garantías se dispuso una condena de más de $700 millones equivalentes a varios años de trabajo.

Todo cambia

Un atinado observador político traía este martes a colación que definitivamente “… en Colombia no hay muertos políticos”. Esto en referencia a que, precisamente en septiembre del año pasado, empezó una de las etapas más difíciles que ha vivido el gobierno Duque porque en ese entonces no tenía mayor gobernabilidad en el Congreso, la coalición estaba debilitada, tenía varios ministros en la mira de mociones de censura y se estaban dando las primeras puntadas para los paros de noviembre y diciembre. Todo ello llevaría a que Duque, entre septiembre y diciembre, cayera al sótano de las encuestas, incluso por debajo del 30%. Hoy, tras su gestión en la pandemia, recuperó terreno y tiene una aprobación del 60% promedio.