Una serie de foros regionales con mujeres en las zonas donde hay alta presencia de cultivos ilícitos realizará la Alta Consejería Presidencial para la Equidad de la Mujer para que “las propuestas no sean solamente de las organizaciones que están en Bogotá, sino de las sociedad civil de mujeres en las  regiones”.

Así se lo refirió a EL NUEVO SIGLO la directora del Centro Regional de Derechos Humanos y Justicia de Género (Humanas Colombia), Adriana Benjumea, al comentar una reunión que organizaciones de mujeres sostuvieron con la alta consejera Nigeria Rentería antes de partir a La Habana, donde desde el lunes participa en la mesa de negociaciones con las Farc.

Según les expuso Rentería a las dirigentes, la idea es preparar un documento sobre las propuestas de las mujeres.

Marina Gallego, coordinadora nacional del movimiento Ruta Pacífica de las Mujeres, contó que a Rentería se le propusieron “programas alternativos de cultivos ilícitos y que se tuvieran políticas claras frente al tema de las sustitución”, así como de “toda la situación de prevención del consumo y las zonas donde se va hacer y donde se va a implementar”.

Gallego expresó que también se planteó una revisión de la política de penalización para las mujeres usadas como mulas del narcotráfico.

“Todo esto está en un paquete que ya le habíamos dicho y le insistimos en que esa propuesta sea llevada y que nos inviten en algún momento”.

Bejumea explicó que Rentería empezará a hacer este tipo de dinámicas antes de cada reunión en La Habana.

“Esa fue la segunda reunión. Ya en diciembre habíamos tenido un encuentro. Lo que ella hace es un proceso de rendición de cuentas de cómo fue recibida. Y ella siempre ha sido clara que ella es la representante del Gobierno y no de las mujeres”, dijo, anotando que es muy distinto hablar del tema de las drogas en la parte rural y cómo están las mujeres en esa cadena de producción de la droga, el tema de los cultivos ilícitos: “Una cosa es la afección a nivel regional y otra a nivel nacional. Y la percusión a las mujeres, porque en muchos casos el microtráfico es la única forma de sustento de las mujeres”.

Claudia Mejía, directora de la corporación Sisma Mujer, aclaró que los puntos en los que hubo mucho debate fue la participación de las mujeres en el microtráfico y en la sustitución de los cultivos ilícitos.

La representante por Bogotá, Ángela Robledo, de la Alianza Verde, comentó que los foros se realizarán en zonas como Putumayo, Norte de Santander y Bogotá.

Farc proponen regular producción y mercado de cultivos ilícitos

Las Farc propusieron en La Habana regular la producción y el mercado de los cultivos ilícitos en Colombia mediante un programa que proteja económica y legalmente a los campesinos dedicados al cultivo de hoja de coca, amapola y marihuana.

La propuesta, presentada por las Farc en los diálogos de paz con el gobierno colombiano que se desarrollan en La Habana, pone énfasis en la "sustitución de los usos ilícitos de los cultivos de hoja de coca, amapola y marihuana", y no en la sustitución de estos cultivos por otros, como pretenden las autoridades colombianas.

La posición de la guerrilla augura que el tema será muy difícil de consensuar entre las partes, que desde hace 14 meses negocian un acuerdo de paz que ponga fin a un conflicto armado de medio siglo.

El plan de la guerrilla contempla "regular la producción y el mercado de la hoja de coca, la amapola y la marihuana, con base en el reconocimiento de las cualidades alimenticias, medicinales, terapéuticas y culturales, a definir en cada caso, así como sus posibilidades artesanales e industriales", dijo a la prensa Jorge Torres, alias Pablo Catatumbo, uno de los delegados de las Farc en los diálogos.

"Las cantidades a producir se establecerán en función de estudios de demanda potencial tanto del mercado interno como del mercado internacional. Ello conlleva la conformación de un mercado legal de hoja de coca, amapola y marihuana, controlado por el Estado a través de un sistema de precios de sustentación y de compras estatales", agregó.

Torres explicó que este "programa nacional de sustitución de los usos ilícitos de los cultivos de hoja de coca, amapola o marihuana" se fundamenta en un "plan piloto" propuesto en junio de 2000 para Cartagena del Chairá por el fallecido jefe guerrillero Pedro Antonio Marín, alias Manuel Marulanda o Tirofijo, durante el pasado proceso de paz.

El programa "supone la provisión de garantías y condiciones de seguridad para la población campesina que habita los territorios y las zonas objeto del Programa. Por ello se hace necesario el inicio inmediato de la desmilitarización de dichos territorios, y su consecuente exclusión como zonas de guerra", añadió Torres.

También implica "la suspensión inmediata de las aspersiones aéreas con agentes químicos como el glifosato" y "la revisión inmediata de la actual política criminal del Estado, centrada en la persecución, la estigmatización y la criminalización de los campesinos productores", señaló./AFP