El mayor Marco Wilson Quijano, condenado a 53 años de cárcel por el homicidio de un hombre a quien hicieron pasar como un guerrillero dado de baja en combate, fue capturado luego de que se hubiese evadido de su lugar de reclusión y se encontraba en su casa.
La captura de Quijano se presentó en su residencia en el conjunto residencial Vegas del Río, del barrio Niza, en la ciudad de Cúcuta, por violencia intrafamiliar a las 2:15 de la madrugada de este jueves 5 de mayo del 2014.
Alexandra Ladino, Directora Nacional de Articulación de Policías Judiciales Especializadas de la Fiscalía General de la Nación, afirmó que Quijano “se encontraba evadido de su lugar de reclusión y fue halladao en su lugar de residencia en Cúcuta. Por esto, la Fiscalía quiere hacer un llamado a las personas encargadas de la reclusión y custodia de las personas miembros de las Fuerzas Armadas que se encuentran privadas de la libertad”. El oficial se encontraba evadido desde hace tres meses.
El oficial fue condenado el 25 de mayo de 2012 por el Juzgado II Especializado de Cundinamarca por los delitos de desaparición forzada, homicidio agravado, falsedad en documento público y concierto para delinquir. Los hechos tienen que ver con la muerte del joven Faír Leonardo Porras Bernal, cuyo cadáver fue presentado como muerto en enfrentamientos con miembros de las llamadas bandas criminales en la vereda La Soledad, zona de El Tabaco, sector de El Tirol, en jurisdicción del municipio Ábrego (Norte de Santander). El oficial (r) era el comandante de la compañía que realizó la acción ese 12 de enero del 2008.
Los militares informaron que durante diez minutos se había producido un enfrentamiento con los cuatro miembros de la banda criminal que según información de inteligencia iban a iniciar extorsiones a la ciudadanía de la zona. Al revisar luego del combate, encontraron el cadáver de Porras, uno de los jóvenes que desapareció en Soacha (Cundinamarca) por la época de los hechos y que después fueron presentados como miembros de la delincuencia dados de baja, en lo que la ciudadanía ha denominado como falsos positivos.