En los actuales momentos que vive el fútbol colombiano, a nivel de Selección, surge la duda en torno a si el equipo mayor debe concentrarse en la disputa de las eliminatorias para el Mundial de Rusia 2018 y afrontar la Copa América con un equipo mixto o alterno.

 

La última palabra la tiene el técnico José Pekerman, quien ha tenido que lidiar con la falta de experiencia de algunos de los convocados y la intranquilidad de no contar con elementos que le brinden la confianza que le daban un Mario Yepes en la defensa o un Falcao García en la delantera.

 

El técnico podría tomar la decisión de llevar el mismo plantel que disputa la eliminatoria suramericana y la explicación sería sencilla: necesita darle ritmo a jugadores que no lo tienen y aprovechar el trabajo y los partidos para que los que llegaron, se compenetren por completo con sus compañeros y ante todo con su pensamiento.

 

Esa sería la determinación más fácil, ante todo si la idea es hacer una buena Copa América Centenario y en los planes se tiene el buscar disputar el título.

 

Sin embargo, se perdería una gran posibilidad de darles oportunidad a jugadores que han venido participando de los microciclos, o que en el pasado formaron parte de la convocatoria pero por algún motivo no volvieron a ser tenidos en cuenta.

 

Si Pekerman opta por esta probabilidad, se tendría un equipo integrado por jugadores que poco compiten en sus clubes, como es el caso de David Ospina, Abel Aguilar, Cristian Zapata, por solo citar a algunos, al lado de Aldo Leao Ramírez, Dorlan Pabón, Camilo Zúñiga, Pablo Armero, quienes por diversas razones desaparecieron del radar del técnico.

 

Y, la terca opción es que Pekerman opte por llevar un plantel totalmente renovado, salvo algunas excepciones, para probar si los jugadores que ha venido observando, realmente le pueden aportar a su proyecto de llevar a Colombia al Mundial de Rusia.

 

La decisión no es sencilla porque de por medio estaría el apostar a la renovación y ver qué sucede, o ir a ser protagonista y buscar ganar la corona.

 

Sea lo que determine el técnico Pekerman, lo evidente es que la Copa América Centenario es una gran oportunidad para mediar la real capacidad de jugadores que han venido pidiendo pista en la Selección y permitir que hombres como Jeison Murillo, Santiago Arias, James Rodríguez, Juan Guillermo Cuadrado y Carlos Bacca, se concentren en la eliminatoria.

 

También es claro que hay jugadores que necesitan minutos y ese es el caso del golero David Ospina, quien a duras penas ataja en la FA Cup y a veces le tocan partidos como el del sábado en el que solo tuvo una intervención de alta exigencia.

 

Colombia en la cita de Estados Unidos tendrá rivales de alta exigencia como el local, Costa Rica y Paraguay, con la ventaja de que solo uno participa de la eliminatoria suramericana.

 

Aun así, los guaraníes siempre son duros y Estados Unidos, por el nivel que ha alcanzado y su condición de local, así como los Ticos, serán un buen termómetro, sea cual sea el equipo que lleve el estratega.

 

Llevar una selección mixta o una totalmente renovada, abriría la posibilidad al técnico y a los colombianos en general para saber sí hay con qué acabar de renovar la selección mayor y, además, ello no indicaría que no se respete a los adversarios o que no se piense en ganar el torneo. Por el contrario, se daría fogueo a elementos que no lo tienen y de una vez por todas Pekerman sabría con quién puede contar en caso de que por alguna eventualidad no disponga de los convocados habitualmente.

 

Hasta ahora el estratega no se ha pronunciado sobre qué piensa hacer y todavía le queda tiempo para decidir, pero sobre el papel, lo ideal sería optar por las alternativas de una selección mixta o una totalmente renovada, con jugadores del torneo local y algunos de equipos mexicanos.

 

“Las expectativas son muchas, pero también hay mucho por trabajar, porque el calendario es muy apretado”, dijo Pekerman.

 

“Si analizan la nómina que jugó la Copa del Mundo a la que después juega la Copa América... Quizá (Colombia) es la de mayor número de jugadores que han cambiado. Esto requiere de una ambientación, de una continuidad que nos está faltando”, dijo.

 

Si es por esta declaración, Pekerman está pensando en llevar al equipo de la eliminatoria para darle continuidad en el juego.

 

Pero los resultados que se den en los próximos dos partidos de la eliminatoria, podrían ser determinantes en la decisión que tome el estratega de cara a la conformación del seleccionado que irá a Estados Unidos.

 

Preguntado sobre la marcha de varios jugadores colombianos al fútbol chino, Pekerman reconoció que ello añade “una dificultad” para el combinado nacional, dados los largos viajes y los pocos días de ambientación con los que contarán esos futbolistas.

 

¿Si hay jugadores que por razón de los equipos en que actúan no se pueden tener en cuenta, por qué no utilizar los de la casa y darles partidos internacionales, roce y determinar si realmente merecen estar en la eliminatoria?

 

Pekerman tiene la última palabra, pero la Copa América Centenario es el escenario ideal para probar jugadores, darles partidos y medirlos, si es que se quiere tener una Selección altamente competitiva en la eliminatoria.