Prosperidad Social realizó una capacitación | El Nuevo Siglo
Miércoles, 4 de Enero de 2012

Ejecutaron 62 proyectos con las líneas de intervención Rural, Urbano, Culinaria Nativa y la estrategia Maíz y Fríjol, en 129 municipios.

Un total de 32.056 familias urbanas y rurales de 26 departamentos enriquecieron los sabores y saberes de su cocina mediante las diferentes líneas de atención del Programa Red de Seguridad Alimentaria (ReSA), liderado por el Departamento para la Prosperidad Social (DPS).
La inversión para 2011 fue cercana a 12.000 millones de pesos, de los cuales 2.369 fueron recursos de cofinanciación y 662 millones corresponden a recursos de cooperación internacional.
Con las líneas ReSA Rural, ReSA Urbano, Culinaria Nativa y la estrategia Maíz y Fríjol, ejecutaron 62 proyectos que permitieron generar en las comunidades un cambio de actitud, produciendo alimentos para el autoconsumo en sus propias huertas y promoviendo hábitos alimentarios saludables por la vía del ahorro.
Del total de las familias beneficiadas, 25.395 pertenecen a la Red Unidos, 2.173 son retornadas, 995 residen en zonas del Plan Nacional del Consolidación Territorial y 600 están en municipios que pertenecen a la estrategia Cero Ilícitos.
De igual manera, y ratificando la importancia de la atención con enfoque diferencial, de los beneficiarios del programa 14.223 son indígenas, 16.391 son afrodescendientes, 438 personas corresponden a población gitana, 126 a raizales y 322 a personas palenqueras.
En 2011, ReSA apoyó de manera decidida la estrategia de Cooperación Sur – Sur, liderando la iniciativa América Latina Caribe sin Hambre, prestando asistencia técnica activa en política pública, tecnologías de la información en seguridad alimentaria y nutricional y montaje y mantenimiento de huertas a países como Grenada, Guyana, Honduras, Jamaica, República Dominicana, la isla de Saint Kitts –miembro de la Comunidad Británica de Naciones- y Guatemala.
Así mismo, con la línea de intervención ReSA-PROSEAN se realizó un trabajo con 20 municipios en temas de seguridad alimentaria y nutricional para la construcción de política pública con miras a determinar el aporte a los Objetivos del Milenio. La labor fue convocada conjuntamente con la Federación Nacional de Municipios.
En las intervenciones de ReSA logran alianzas de cooperación y cofinanciación con entidades del orden internacional, nacional, regional o local como alcaldías, corporaciones autónomas regionales, entidades ambientales, gobernaciones, gremios, fundaciones empresariales, ONG, entre otros, en zonas priorizadas por condiciones de alta vulnerabilidad o exclusión social y en regiones afectadas por desastres naturales.
Las familias participantes son inscritas por grupos focales en los territorios, por parte del operador; e inician un plan de actividades mediante el cual se motivan a producir alimentos en sus predios, rurales o urbanos, a través de huertas de autoconsumo, para de esta manera mejorar el acceso a una alimentación variada y balanceada por la vía del no gasto.
Las familias además tienen oportunidades para desarrollar hábitos saludables en la manipulación y preparación de alimentos de manera nutritiva y adecuada a los hábitos, gustos y tradiciones culinarias de las regiones.
La sostenibilidad de las parcelas de autoconsumo se da por la corresponsabilidad de los integrantes del núcleo familiar en generar alimentos de manera variada y continua y adoptar hábitos para disponibilidad a nivel familiar, el acceso, el consumo y el manejo inocuo de alimentos.
El DPS pretende que los proyectos de la ReSA logren alianzas de cooperación, cofinanciación y asistencia técnica con entidades del orden internacional –públicas o privadas-, nacionales del orden central o descentralizadas, regionales o locales, tales como ministerios, entidades ambientales, departamentos, alcaldías, corporaciones autónomas regionales, organismos mixtos, gremios, corporaciones, fundaciones y ONG en general, entre otras, con el propósito de aunar esfuerzos en el camino para lograr la seguridad alimentaria y nutricional de las familias más vulnerables del país, ampliar su cobertura, optimizar los recursos y promover la participación de la sociedad civil en proyectos de seguridad alimentaria.
La ReSA encomendará al Área de Gestión de Contratos y Liquidaciones para el cumplimiento de su objeto misional, las modalidades de contratación mediante procedimientos de la Ley 80 de 1993 y Ley 1150 de 2007 y sus decretos reglamentarios por los mecanismos de licitación pública, selección abreviada o contratación directa. Además, dada la naturaleza y fines que pretenden impulsar programas, proyectos y actividades de interés público, eminentemente social, acordes con el Plan Nacional y los Planes Seccionales de Desarrollo, propondrá la celebración de convenios basados en el artículo 355 de la Constitución Política y sus Decretos reglamentarios 777 y 1403 de 1992; así como impulsará acuerdos interadministrativos que permitan desarrollar proyectos basados en la filosofía ReSA.