La conciencia ambiental que desde hace unas pocas décadas se tomó el mundo, también se siente en el Congreso de la República con varias iniciativas orientadas a la protección de los recursos naturales, como los humedales. Uno de estos últimos proyectos busca el desmonte paulatino de la producción y uso de bolsas plástica de único uso.

Es sabido que desde hace tiempo en la mayoría de los países desarrollados se restringen las bolsas plásticas de único uso. Conocedores de esto, por ejemplo, los clientes en los supermercados llevan su bolsa de múltiple uso o tienen que cargar las cosas en la mano.

En cambio en nuestro país no hay norma alguna que controle la producción de bolsas y empaques plásticos, mucho menos su uso y reciclaje.

Los plásticos están entre los materiales más contaminantes y que afectan el medio ambiente por el tiempo que tardan en degradarse, entre 100 y mil años.

El proyecto de ley en cuestión es el No. 163 de 2015 Cámara, el cual fue radicado el 19 de noviembre pasado por el senador Antonio Guerra de la Espriella (Partido Cambio Radical) y el representante a la Cámara por Atlántico, Mauricio Gómez Amín (Partido Liberal).

La iniciativa está para discusión en la Comisión Quinta de la Cámara, en donde lo primero que se debe hacer es designar los ponentes en marzo venidero.

El proyecto tiene por objeto “el desmonte paulatino en la producción y uso de bolsas plásticas de único uso, inútiles y no reutilizables a fin de minimizar los graves perjuicios que el exceso de este tipo de productos está generando en el ambiente. Así mismo comprometer a toda la cadena de producción, distribución y consumo a buscar alternativas para evitar la proliferación en el ambiente de éstas”.

La iniciativa se pone como meta la eliminación del uso de las bolsas de plástico de único uso, inútiles o no reutilizables en un 80% para el año 2020 y para el 2025 su completa eliminación.

Para lograr la reducción  de la producción de bolsas plásticas, el proyecto de ley establece que el Gobierno nacional iniciará un programa integral para el desmonte paulatino de la producción, distribución, consumo de bolsas plásticas de único uso, inútiles o no reutilizables a través de la autoridad ambiental nacional y las autoridades regionales y locales, hasta lograr su eliminación.

Este programa deberá involucrar al sector público y privado, a los productores, distribuidores, a los supermercados de grandes superficies, a los vendedores de tiendas, a los consumidores y a las empresas de reciclaje y disposición final de los productos.

El senador Guerra y el representante Gómez Amín señalan en la exposición de motivos que el proyecto se “desarrolla en dos sentidos: una política para disminuir la producción, comercialización y uso de las bolsas plásticas de único uso, y otro creando dos entidades: una nacional y otra municipal para el desarrollo de políticas que se apliquen unificadamente para lograr la disminución referida”.

Por ello se crea un Sistema Único de Articulación para el manejo de residuos generados por empaques y bolsas plásticas, al que se vinculan las entidades ya instituidas en el Estado para el manejo de los temas afines: Ministerio de Medio Ambiente y Ministerio de Industria y Comercio, entre otros.

Varios intentos

No es la primera vez que se busca desde el Congreso de la República poner límites a la producción y utilización de las bolsas plásticas. En el año 2013, el representante a la Cámara Juan Carlos Martínez presentó el proyecto de ley No. 116 “por medio de la cual se busca regular los desechos plásticos y la protección y recuperación ambiental, como derecho de los seres humanos a una vida saludable y productiva en armonía con la naturaleza”.

Ya en el año 2008, los representantes Simón Gaviria Muñoz, hoy director del Departamento Nacional de Planeación,  y David Luna, actualmente ministro de las TIC, presentaron el proyecto de ley No. 77 Senado “por medio de la cual se fomenta el uso de bolsas que contengan alternativas tecnológicas de mitigación ambiental en establecimientos comerciales”.

También en el 2008, el senador Guerra había presentado una iniciativa en similar sentido, por medio de la cual se creaba el Sistema Único de Articulación colombiano para el manejo de los desechos sólidos generados por empaques y envases plásticos, se establecen lineamientos para la reducción en el origen, se restringe el uso gratuito de bolsas plásticas en tiendas, supermercados y grandes superficies en Colombia.

Supermercados

A partir de la vigencia de la norma que proponen los legisladores Guerra y Gómez, los supermercados empezarán a distribuir bolsas plásticas de múltiples usos y podrán cobrar a sus clientes por éstas, establece la iniciativa.

En este sentido añade que “los supermercados de grandes superficies, las tiendas y los almacenes deberán hacer campañas para dar a conocer a sus clientes que las bolsas que se entregan sin costo alguno pueden ser devueltas al mismo supermercado o a centros de acopio para su reutilización o reciclaje”.

Dice además que las autoridades locales podrán establecer beneficios para los supermercados que cumplan con esta normatividad.

Los supermercados por su parte podrán dar a sus clientes incentivos de tipo económico, promocional y en general toda aquella actividad que permita lograr los propósitos de esta norma.