Un futuro incierto es lo que le espera a Nala, la leona africana que en 2008 fue decomisada por la Secretaría Distrital de Ambiente y la Sijin en razón del maltrato al que habría estado siendo sometida en el Circo Nacional los Muchachos.
Desde que fue trasladada a las instalaciones del zoológico del parque Jaime Duque, Nala inició un proceso de recuperación tras ser hallada en un avanzado estado de desnutrición, con laceraciones en su piel y alteraciones comportamentales por el estrés (su hermano Pumba habría muerto por el maltrato propiciado en el circo).
Sin embargo, un reciente fallo del Tribunal Administrativo de Cundinamarca obligaría a la Secretaría de Ambiente a devolver a Nala a manos de su dueño Orlando Valencia quien en 2009 fue declarado culpable por crueldad contra los animales.
Ante este hecho, la bancada animalista del Concejo de Bogotá manifiesta su rotunda oposición, en razón a los actos de abuso que motivaron el decomiso de Nala, señalados como actos de crueldad por el Estatuto Nacional de Protección Animal (Ley 84 de 1989). También, por los avances jurisprudenciales que han reconocido a los animales dignidad y el carácter de seres vivos sintientes (Sentencia C-666 de 2010 de la HCC y Sentencia del Consejo de Estado del 23 de mayo de 2012) y la reciente Ley 1638 de 2013, “por medio de la cual se prohíbe el uso de animales silvestres, ya sean nativos o exóticos, en circos fijos e itinerantes”. Finalmente, por los avanzados planteamientos de política pública de protección animal de Bogotá D.C., contemplados en el Plan de Desarrollo 2012-2016 Bogotá Humana (proyecto “Bogotá Humana con la fauna”, art. 31).
A juicio de los concejales de la bancada, devolver a Nala a manos de sus maltratadores, no sólo sería un retroceso normativo y jurisprudencial con relación a la protección de los animales, sino un mensaje nefasto y contraproducente frente a los enormes esfuerzos sociales que hoy se adelantan en Colombia y el mundo con relación a los derechos de los animales. Además, implicaría nuevamente poner en riesgo su vida y someterla al maltrato propio de los circos, caracterizado por privación, confinamiento, estrés, sufrimiento físico y psicológico.
En razón a lo anterior, la bancada animalista del Concejo de Bogotá espera que el Consejo de Estado falle favorablemente la acción de tutela contra providencia judicial interpuesta por la Secretaría de Ambiente y tome una decisión que anteponga el derecho de Nala a gozar de una vida en condiciones de bienestar, a los intereses económicos de los empresarios circenses responsables de maltrato animal.
Además, se unen a las voces de protesta que rechazan tajantemente cualquier posibilidad de retorno forzado de Nala al sufrimiento y maltrato que padeció durante años en el circo del cual fue decomisada, por lo cual instaurarán una acción de tutela para evitar el acto administrativo de dar cumplimiento al fallo y proteger la vida de Nala, siguiendo la línea jurisprudencial de la Corte Constitucional. Para ello, apelarán a los avances del derecho positivo que viene incorporando a los animales como sujetos de consideración moral y al clamor de las nuevas ciudadanías que hoy reclaman derechos para la naturaleza.
La bancada animalista invita a la recolección de firmas que se adelantará este viernes 25 de octubre en las afueras del Concejo para apoyar la Acción de Tutela.
El lunes 28 a las 10:00 a.m. habrá una congregación ciudadana en las afueras del Palacio de Justicia para la instauración de la Acción de Tutela.