La Procuraduría General de la Nación afirmó que el exparlamentario junto a los militares trataron de “distorsionar” los hechos sobre el asesinato de 42 personas en masacre de Segovia.

“Todas las constancias procesales que se han allegado legalmente y oportunamente demuestran en el mayor grado de convicción que César Pérez García fue el determinador de la Masacre de Segovia junto a los grupos paramilitares”, dijo el procurador delegado Jairo Salgado, quien acto seguido pidió a los magistrados de la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia que dicten sentencia condenatoria contra el excongresista liberal.

En el criterio de la Procuraduría, el exrepresentante a la Cámara solicitó a Fidel Castaño Gil, excomandante paramilitar, que llevara a cabo una matanza contra un grupo de personas en el municipio de Segovia, puesto que éstas eran partidarias del partido de izquierda UP, y así “retomar el poder del Partido Liberal en el nordeste antioquieño”.

Que el mismo excongresista y un grupo de militares involucrados en la masacre de 42 personas registrada en noviembre de 1988 “intentaron por todos los medios” distorsionar la investigación, manipular testigos y ocultar pruebas del proceso que se llevaba por la matanza.

No obstante, diversos testigos y pruebas que fueron agrupadas por la Corte Suprema de Justicia dan cuenta de todos los hechos ocurridos esa nefasta noche, así como sus responsables y los intereses que motivaron la masacre, considerada por el Ministerio Público como un “hecho vergonzoso para la historia del país”.

Declaraciones

Rita Ivonne Tobón,  exalcaldesa del municipio rendirá declaración ante la Corte Suprema, vía teleconferencia desde Suiza contra el excongresista César Pérez García por sus presuntos nexos con los grupos paramilitares que operaban en la zona. 

Pérez García fue señalado por uno el excomandante paramilitar Alonso de Jesús Baquero, alias ‘el Negro Vladimir’, de financiar la masacre, con el único fin de conseguir el control político en la zona.

El excongresista Perez permanece recluido, desde julio del 2010 en el llamado pabellón de los parapolíticos en la cárcel Picota de Bogotá.