El proceso que se adelanta busca llevar a la terminación del conflicto y esté deberá acabar cuando concluya la negociación, afirmó el jefe negociador del gobierno en La Habana, Humberto de La Calle.
A renglón seguido, de La Calle sostuvo que en la mesa de La Habana el Gobierno ha accedido a romper la agenda pactada. “En ese momento se abre lo que solemos llamar la fase 3, es una fase de más larga duración de un período que podría ser de una década donde debe operar una serie de cambios que permitan conseguir esa paz estable y duradera”.
El gobierno del presidente Juan Manuel Santos y las Farc dialogan en Cuba desde 2012 en torno a una agenda que incluye el desarrollo rural, la participación política, las drogas ilícitas, el abandono de las armas y la atención a las víctimas.
"Las discusiones en La Habana (...) no tienen como propósito la ilusión de que uno firma un documento allá y estamos en paz en Colombia", destacó De la Calle.
El jefe de la delegación del gobierno dijo además que en la mesa de negociación las partes están buscando "un mecanismo complejo" que permita "garantizar los acuerdos" a los que se llegue y establecer "una vía rápida" para su implementación.
El gobierno ha propuesto refrendar los acuerdos por medio de un referendo, rechazado por las Farc por considerarlo "no vinculante". La guerrilla, por su parte, ha propuesto la realización de una Asamblea Constituyente, a lo que el gobierno se niega.