Según las autoridades, en la Universidad Pontificia Bolivariana de Medellín, se comprobó que dos de sus funcionarios estaban negociando el cambio de notas de los estudiantes en el sistema por el pago de $400 mil a $1 millón de pesos.

Los funcionarios llevaban trabajando en la institución por lo menos 10 años, según confirmó el jefe de comunicaciones de la Universidad, Mauricio Pineda.

Pineda aseguró que el “cartel de notas” comenzó en marzo de este año y un gran número de alumnos accedieron a realizar el “negocio” con los funcionarios implicados. Las autoridades también han confirmado que el caso no solo se ha presentado en la sede de Medellín sino en las sedes de Monteria y Bucaramanga.