El presidente hondureño, Juan Orlando Hernández, se comprometió a mejorar el respeto de los derechos humanos y la seguridad, que tiene a su país con la tasa de homicidios más alta del mundo, durante una reunión con funcionarios estadounidenses, informaron fuentes oficiales.
"El presidente Hernández participó (en la reunión) e hizo una declaración bastante fuerte y clara en cuanto al compromiso de su gobierno de mejorar los derechos humanos", declaró en rueda de prensa la embajadora de Estados Unidos en Honduras, Lisa Kubiske, al terminar el encuentro.
En el encuentro participaron los subsecretarios de Estado adjuntos para la Democracia, Derechos Humanos y Trabajo, Michael Kozak; para Asuntos Internacionales de Narcotráfico y Aplicación de la Ley, Luis Arreaga, y para Asuntos del Hemisferio Occidental, Francisco Palmieri, quienes llegaron el jueves a Tegucigalpa.
Los subsecretarios y Hernández estuvieron en la cuarta reunión del llamado Grupo Bilateral de Trabajo sobre Derechos Humanos de Estados Unidos y Honduras creado hace dos años.
Los funcionarios estadounidenses también se reunieron con representantes de organismos de derechos humanos que cuestionan al gobierno de Hernández porque a su juicio no respeta estos derechos, ni hace lo suficiente para combatir la criminalidad.
Sin embargo, la embajadora estadounidense reconoció que "Honduras ha hecho esfuerzos concretos en los pocos meses de este gobierno" de Hernández, quien se instaló el 27 de enero pasado. Asimismo, dijo: "Estamos de acuerdo que hay desafíos significativos para el futuro".
"Nosotros como Estados Unidos reiteramos nuestros compromiso de cooperar con Honduras en sus esfuerzos y apoyamos mucho los esfuerzos del gobierno para mejorar" el respeto a los derechos humanos y la seguridad, añadió la diplomática.
También recordó que su presidente, Barack Obama, dijo recientemente que el apoyo de Estados Unidos a la democracia y el respeto de los derechos humanos también es un asunto de seguridad nacional.
La violencia es el principal problema de Honduras, con la tasa de homicidios más elevada del mundo, de 79 por cada 100.000 habitantes, según el Observatorio de la Universidad Nacional.
Al tomar posesión, Hernández reclamó mayor ayuda a Estados Unidos y atribuye a los narcotraficantes siete de cada diez homicidios que ocurren en su país./AFP