“Yo preferiría que haya particulares portando pistolas Taser de una letalidad reducida y no particulares portando armas de fuego que son de una letalidad mayor”, dijo el director de la Policía Nacional, general Rodolfo Palomino.
Las declaraciones del alto oficial se dieron durante una discusión de la reforma del Código de Convivencia y Policía que continúa hoy en la Comisión Primera de Senado.
Sin embargo, el general Palomino manifestó que “la idea es que ni la una ni la otra estén en poder de particulares”; y es que precisamente, estas armas no letales están cobrando fuerza en mercados en redes sociales ante la creciente inseguridad en sistemas de transporte, como el Transmilenio.
El uso de estas pistolas tipo Taser ha sido ampliamente criticado desde que la Policía expidió, hace más de tres años, la resolución con la que habilitó a los miembros de la institución para usarlas en contra de quienes alteren el orden público.
Uno de los férreos opositores a esta arma es el personero de Bogotá, Ricardo Cañón, quien denunció su uso ante el Consejo de Estado, argumentando que estos “se presentan como una forma de tortura por el alto dolor que le inflige al ser humano y a otros seres vivos en su empleo”.