Iker Casillas, guardameta del Real Madrid, es tal vez el portero español más querido de todos los tiempos por su liderazgo en las canchas y gran capacidad atajadora que demostró por más de una década en su club y con la Selección española, con la que quedó campeón en la Copa Mundo Suráfrica 2010. Sin embargo el guardameta no pasa por su mejor momento y a pesar de que muchos técnicos lo consideran uno de los mejores bajo los tres palos, el cancerbero no es titular en su escuadra y al parecer no lo será por un largo tiempo.

Los problemas de Casillas iniciaron desde diciembre del año pasado cuando a manos del técnico José Mourinho, el portero, que había durado más de diez años sin ser reemplazado en un partido y como capitán del Real Madrid, llegó a la suplencia por su compañero, Antonio Adán.

Hasta ese momento el único que se había atrevido a sentar al guardameta había sido el seleccionador español Vicente del Bosque, en el año 2002, y desde allí pasaron 12 diferentes entrenadores por el Real Madrid que no se atrevieron a hacerlo hasta la llegada del portugués Mourinho.  

Además ese fue el  inicio de la ruptura del conjunto merengue entre el luso y sus dirigidos, que meses después estalló provocando la salida del técnico por la puerta trasera, tras entrar como aquel que renacería las mejores épocas  de la escuadra española.

Luego en enero de ese año el guardameta sufrió una lesión en su mano izquierda que lo inhabilitó de las canchas por dos meses, y ese fue tal vez el acabose para que Mourinho tuviera la excusa perfecta para no ponerlo de titular.

Tras la salida de Mourinho llegó Carlo Ancelotti para esta nueva temporada que comenzó el pasado domingo y en la cual Casillas inició en la banca, en un partido jugó de principio a fin su compañero,  Diego López, quien se inclina para durar allí el resto de la temporada.  

 El futuro para Iker y el Real

Ahora el problema número uno para el italiano Ancelotti, es quién será el portero que salvaguarde la valla de los merengues sin desencantar a los hinchas que ya chiflaron a López, pidiendo que les dieran a Iker, hace tan sólo tres días, en el trofeo Bernabéu.

En dicho partido, que Real Madrid jugó contra el Al Assab, encuentro que a su vez sirvió para homenajear al ex delantero blanco, Raúl González, el primero en entrar a la cancha fue Casillas, pero a los 40 minutos del primer tiempo el técnico decidió poner a calentar a López a la vista del público, lo que desencantó a los asistentes que lo chiflaron sin cesar. Hecho que Ancelotti calificó como “desagradable” para él, ya que “yo intento tomar las decisiones para que el equipo gane”, aseguró.

“¡Quiero que la gente entienda que no va a jugar Diego; que no va a jugar Iker, sino que va a jugar el portero del Madrid! No va a jugar Kaká, no va a jugar Benzema, sino que va a jugar un jugador del Real Madrid. He jugado muchas veces en el Bernabéu y no es fácil como adversario por el ambiente que hay. Para nosotros es muy importante el apoyo de los aficionados. El Bernabéu es nuestra casa y en nuestra casa tenemos que estar cómodos”, explicó Ancelotti tras el encuentro, pero con una razón que no entiende ni Del Bosque, aquel que sentó por primera vez al que fue el mejor portero del mundo hace pocos meses.  

Aunque Vicente del Bosque no habló sobre la suplencia del portero en el conjunto merengue, sí dijo: "Debemos asociar a Iker a muchos años representando a nuestro fútbol. Son 149 partidos internacionales y eso es la leche. Debemos ser muy cariñosos, muy respetuosos y afectuosos con él y con quien compita con él".

Y a lo contado se suma que Diego López fue titular ayer del partido ante el Granada, ratificando que Ancelotti le apuesta a dejar sentado a Iker, por lo que se abre una posibilidad de que Casillas se vaya para el Barcelona, como se empezó a rumorar hace unos días, pero que aún no está confirmado y que sería una difícil decisión para el portero, quien alguna vez señaló: “estoy encantado de estar en el club, en mi casa, en Madrid, con mi gente y con mi familia”.