"No es bueno que Petro esté apoyando a Biden", consideró este viernes el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Durante un acto de su campaña releccionista, realizado en Doral, ciudad ubicada en el Condado de Miami-Dade, en Florida, Trump se refirió a Joe Biden, su rival demócrata de cara a los comicios presidenciales del 3 de noviembre, quien fuera ‘vice’ del exmandatario Barack Obama, y al senador colombiano Gustavo Petro.
En el encuentro, denominado Latinos for Trump Roundtable, Trump conversó con varias personas de la comunidad hispana, expresando sus puntos de vista sobre temas que involucran intereses de los inmigrantes latinoamericanos, como la amenaza del comercio chino y las dictaduras en Cuba, Venezuela y Nicaragua.
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Al revisar varios de esos puntos, Trump señaló que “la anterior administración se rindió ante el narcoterrorismo en Colombia”.
“¿Alguien acá es de Colombia?”, interpeló en medio de la algarabía de los asistentes. “¿Saben qué ocurre allá, verdad?”, remachó.
“Lo que ocurrió allá es que Joe Biden recibió el apoyo del socialista Gustavo Petro”, dijo en medio de los abucheos.
“Eso no está bien, no es un buen apoyo”, recalcó Trump, recordando que el congresista colombiano militó en la guerrilla del M-19. “En mi administración trabajaremos junto con nuestra contraparte colombiana para estabilizar la región”, anotó.
El jueves por la noche, Trump aseveró en un certamen realizado en Jacksonville, en la costa noreste de Florida, que “la última administración también negoció el terrible tratado Obama-Biden-Santos con los carteles de la droga colombianos. Ellos se rindieron ante los narcoterroristas y causaron que la producción de drogas ilícitas se disparara”.
Ante la divulgación de lo dicho por Trump, al cierre de esta edición Petro se había limitado a trinar que el mandatario "acaba de aceptar los consejos de los políticos colombianos, íntimamente ligados con el narcotráfico y el genocidio en Colombia". Más adelante propuso decirle que “sus aliados en Colombia son los que se han empoderado gracias al dinero del narcotráfico y que ellos han producido un genocidio en nuestro país”.
Trump aseveró en un certamen realizado en Jacksonville, en la costa noreste de Florida, que “la última administración también negoció el terrible tratado Obama-Biden-Santos con los carteles de la droga colombianos”.
Petro-Biden
Las alusiones a los vínculos entre Petro y Biden han tenido particular eco en Florida, donde la campaña de Trump se ha enfocado en subrayar la cercanía entre las posiciones del ex vicepresidente norteamericano con el Socialismo del Siglo XXI, tema sobre el que nadie es neutral entre el electorado hispano de la península.
Por otra parte, la referencia de Trump al apoyo de Petro a Biden se refiere a un incidente ocurrido en agosto, luego de la difusión de un comercial de propaganda política de apoyo a la reelección que comparó al exvicepresidente estadounidense con el senador colombiano.
La cuña televisiva, emitida en español, asociaba a figuras del socialismo como Hugo Chávez, Nicolás Maduro y Fidel Castro con el progresismo de Biden.
Sobre esta información, Noticias Caracol difundió una nota en sus emisiones que replicó en sus redes sociales anunciando que Trump lo comparaba con Chávez y Castro, a lo que Petro corrigió: “No es Trump amigos de Caracol, es su campaña en la Florida llena de destacados uribistas”.
Y agregó: “Si estuviera en Estados Unidos con derecho al voto yo votaría por Biden, solo para salvar a la humanidad de una hecatombe”.
La reacción no se hizo esperar y Mercedes Schlapp, asesora de comunicaciones de la campaña de Trump, le expresó a Petro que “durante su campaña”, Biden “se ha rodeado de socialistas como usted, como Bernie Sanders y como la comunista Karen Bass”.
Schlapp le dio las “gracias” a Petro “por informarles a millones de hispanos de nuestra gran nación que un voto” por Biden “sería un voto por el castrochavismo y por las ideas progresistas que usted y Joe Biden promueven”.
En otro tuit, en reacción a una nota publicada en el diario El Tiempo, Petro aseguró que “ya veo que para la extrema derecha latina norteamericana, Washington también era castrochavista, porque Washington era un brillante progresista”.
Ripostó Schlapp que “el pueblo colombiano fue muy sabio en 2018 y los hispanos que vivimos en Estados Unidos también seremos sabios este noviembre, porque no tenemos miedo de decir abiertamente que nos oponemos al régimen de La Habana” y a Maduro, “el títere de su amigo Hugo Chávez”.
Progresismo
Como lo publicó EL NUEVO SIGLO, el video de Latinos por Trump, aun visible en redes sociales, dura 34 segundos y comienza con una intervención en la que Biden declaró que será uno de los presidentes “más progresistas” de la historia de Estados Unidos.
Un letrero sobre el ex vicepresidente Biden pregunta, “¿progresista?”, tras lo cual aparecen figuras socialistas de América Latina, como el fallecido presidente venezolano Chávez, cuya imagen es acompañada por su voz diciendo “nuestros gobiernos progresistas”, para luego aparecer sucesivamente el desaparecido líder cubano Castro, el mandatario chavista Maduro y el senador Petro, a quien se le oye decir que “este nuevo eje progresista tendría aliados poderosísimos”.
Al final, Biden aparece abrazado con su copartidario y retirado contrincante por la nominación demócrata el senador Sanders, autodenominado como socialista democrático.
Trump dijo que si en las presidenciales de noviembre llega a ganar Biden el destino de la Unión Americana será el mismo de Venezuela.
En el video se advierte que cuando quieren decir progresista se refieren a “una revolución socialista en las propias narices de Estados Unidos”, según se escucha en un extracto de un discurso de Castro, agregando un letrero que iguala progresismo con socialismo, dos conceptos con distinto significado en la política estadounidense, pero igualmente rechazados por los sectores conservadores.
Lo de “progresismo=socialismo” está escrito sobre una fotografía del breve apretón de manos que Biden, entonces ‘vice’ de Obama, y Maduro protagonizaron en enero de 2015 durante la toma de posesión de la depuesta presidenta brasileña Dilma Rousseff.
La fórmula “progresismo=socialismo va dirigida a Florida, donde hay más de un millón de cubanos y unos 200.000 venezolanos, y tiene 29 votos del colegio electoral que Trump ganó en las elecciones de 2016.
Poco antes de la publicación del video, Trump dijo que si en las presidenciales de noviembre llega a ganar Biden el destino de la Unión Americana será el mismo de Venezuela.
Tras expresar que Venezuela era uno de los países más ricos del mundo, planteó que por la gestión de un socialista como Maduro, ahora es uno de los más pobres. “Tienen petróleo y no tienen agua, comida ni luz”, resaltó.
Socialismo
En julio, dos semanas antes del video, durante su viaje a Florida para visitar el Comando Sur y participar en un foro, Trump se comprometió a derrotar el socialismo en Venezuela, Cuba y Estados Unidos.
En el foro ante la comunidad venezolana y cubana, que se celebró en la Iglesia Centro de Adoración de Jesús, Trump reiteró su respaldo al presidente interino Juan Guaidó y recordó que su gobierno puso fin a la política de Obama y Biden ante el régimen de Castro, política a la que calificó de "ridícula".
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Muchos participantes dieron las gracias a Trump por sus políticas y por cumplir su promesa de luchar contra el socialismo en la región. Según lo reportó el Miami Herald, el pastor Mario Bramnick afirmó que “usted es lo que está parado entre el capitalismo y el socialismo”, mientras que el representante cubano estadunidense Mario Díaz-Balart declaró que “la historia lo registrará como el presidente que liberó a este hemisferio del socialismo”.
En respuesta a las historias de los presentes sobre cómo huyeron de países socialistas, Trump comentó que Biden es un títere de Sanders, de la representante demócrata Alexandria Ocasio-Cortez y la izquierda radical, anotando que “nadie estaría seguro en una América de Biden”.
El mandatario, además, los acusó de estar del lado de aquellos que están tumbando estatuas de los padres fundadores del país. Incluso, acusó a los demócratas de desear "remover estatuas de Jesucristo".