Inesperadamente volvió al debate nacional, la construcción del puerto de Tribugá en el municipio chocoano de Nuquí.
Resulta que ayer se celebró una reunión de la junta directiva de la Sociedad Portuaria Arquímedes, promotora del proyecto, en la que participó el gobernador encargado del Chocó, Jefferson Mena, quien según la información divulgada por su despacho “manifestó el deseo de trabajar arduamente y hacer todo lo que está al alcance para avanzar en la realización de este sueño de la comunidad chocoana”.
“¿El sueño de los chocoanos?”, trinó la cantante Gloria Emilse Martínez (más conocida como Goyo, integrante del grupo Chocquibtown), para agregar que “soñamos con hospitales de primer nivel, inversión en la educación, tecnología, agua potable. Soñamos con desintoxicar los ríos. Soñamos con tener al menos energía, en pueblos que aún no la tienen de manera estable. ¿Será que sí entendió?”.
En medio de la lluvia de críticas a Mena, la representante vallecaucana Catalina Ortiz, de la Alianza Verde, consideró que “en la crisis por el Covid-19 los esfuerzos de la Gobernación deberían estar en temas prioritarios como salud, empleo, educación. No en trabajar en un proyecto que no genera provecho a los habitantes del Pacífico. Seguiremos luchando contra este proyecto”.
Ortiz recordó que hace un año, durante la discusión del Plan Nacional de Desarrollo. “Dimos el debate en el Congreso con Iván Marulanda en contra de la construcción de un puerto de aguas profundas en Tribugá. Hoy, la Gobernación del Chocó anuncia que seguirá empeñado en este proyecto, que además de ser innecesario, atentaría gravemente la biodiversidad del país”.
Mena, quien venía desempeñándose como director territorial de la Oficina del Alto Comisionado para la Paz, fue designado el 30 de abril por el presidente Iván Duque como gobernador encargado del Chocó en reemplazo de su titular Ariel Palacios, a quien la Procuraduría suspendió por tres meses acusado de posibles irregularidades en la firma de un contrato con la fundación Chocó Saludable por $2.091 millones para adelantar jornadas de salud preventiva.
El proyecto portuario, una idea que ya completa tres décadas, estaría asentado en el Golfo de Tribugá y contaría con una inversión de US$132,9 millones por parte de las cámaras de comercio de Manizales, Pereira y Chocó, la Gobernación del Chocó, el Concejo de Nuquí y varias organizaciones del Eje Cafetero, como Infimanizales, el municipio de Dosquebradas (Risaralda) o los comités intergremiales de Pereira y Caldas.
El puerto ya cuenta con factibilidad técnica, financiera y legal, además está en proceso de estudios ambientales ante la Agencia Nacional de Licencias Ambientales (ANLA), entidad a la que la Procuraduría le pidió aplicar el principio de precaución frente al desarrollo de cualquier proyecto en el Golfo de Tribugá y evaluar la pertinencia de abstenerse de otorgar autorizaciones o permisos hasta que no haya estudios científicos para determinar los impactos que se puedan generar al ecosistema.