El Gobierno nacional, a pesar de las críticas, designó esta semana mediante Decreto 247 de 2019 al historiador y catedrático Rubén Darío Acevedo Carmona como director general del Centro Nacional de Memoria Histórica, entidad creada con la Justicia Transicional y que se encarga de guardar la historia del país en cuanto a conflicto armado interno.
El propósito de preservar estos documentos es darle cumplimiento al precepto de Verdad, Justicia, Reparación y No Repetición para que jamás vuelvan a ocurrir las atrocidades que han enlutado a Colombia por más de seis décadas.
La búsqueda de un director para la entidad no ha sido fácil. Primero fue cuestionado el periodista Mario Javier Pacheco por afirmar que el Centro de Memoria “es otra estructura del Estado infiltrada por las Farc” y tampoco pudo asumir el catedrático Vicente Torrijos por posibles irregularidades con un certificado doctoral.
Y ahora, organizaciones de víctimas han criticado el nombramiento del profesor Acevedo Carmona, quien públicamente ha negado la existencia del conflicto armado.
En una reciente entrevista al periódico El Colombiano, de Medellín, Acevedo afirmó que “hay quienes sostienen que lo vivido en Colombia fue un conflicto armado, algo así como un enfrentamiento entre el Estado y unas organizaciones levantadas contra él; otros piensan que fue una defensa del Estado de una amenaza terrorista y de unas organizaciones que habían degenerado en su perspectiva política al mezclarse con el secuestro, el narcotráfico y los crímenes de lesa humanidad. Aunque la Ley de Víctimas dice que lo vivido fue un conflicto armado eso no puede convertirse en una verdad oficial”.
Pese a las críticas, el nuevo funcionario se ha defendido diciendo que la Constitución contempla la libertad de expresión y de opinión como un derecho fundamental: “En ese ejercicio como ciudadano he expresado mis opiniones sobre muchos temas del área nacional, sobre los problemas de la política, de la violencia, de las guerrillas, de los paramilitares”.
Pero, además, aseguró que “no voy a ocupar un cargo público para defender mis criterios ideológicos o políticos, sino para desarrollar las funciones que están contempladas en el cargo”.
Entre los críticos del nombramiento está el académico Rodrigo Uprimny, director de la ONG Dejusticia, quien en sus redes sociales escribió que “nombrar a Darío Acevedo de director del Centro de Memoria Histórica es como nombrar director de un programa nacional de vacunación a alguien que no ‘cree’ en las vacunas”.
Para Uprimny, la “Ley de víctimas (arts 2,3 y 146-148 Ley 1448) dice que Centro de Memoria Histórica debe documentar atrocidades ‘ocurridas con ocasión del conflicto armado interno’. Pero pretenden nombrar como director a Darío Avevedo, quien considera que no ha habido conflicto armado en Colombia”, agregando que la objeción “no es por sus posturas políticas sino porque es incongruente, incluso ilegal, que alguien que niega el conflicto armado dirija una institución que tiene, por ley, que documentar las atrocidades ocurridas con ocasión del conflicto armado”.
Otros académicos han llamado la atención sobre la posición de Acevedo Carmona frente al conflicto armado, pues recuerdan que el nuevo director del CNMH fue en los años 70 militante activo de un movimiento político disidente del Epl.