Por María A. Castillo

Periodista de EL NUEVO SIGLO

DOS JÓVENES bogotanos, Nicolás Gómez Arenas y Felipe Rodríguez Marroquín, lanzaron ayer una investigación conjunta que pone lupa a la administración de Gustavo Petro en 120 páginas

Esta publicación, que se convierte en el primer proyecto investigativo de la Fundación Democracia & Libertad, un espacio también ideado por ambos autores para motivar la participación de la juventud colombiana más allá del activismo de las redes sociales. El documento detalla las presuntas irregularidades presentadas durante la gestión del exalcalde capitalino, a partir de una minuciosa investigación sobre las pesquisas de los órganos de control, registros contractuales y denuncias en los medios de comunicación.

EL NUEVO SIGLO: ¿Por qué decidieron hablar específicamente sobre la administración de Gustavo Petro?

NICOLAS GÓMEZ ARENAS: Nosotros sabemos que Gustavo Petro es una figura controversial en el aspecto político de los últimos años, y en este libro intentamos ser más objetivos que políticos; buscamos hacer un escrutinio público de la mala gestión de la alcaldía de Petro. Este libro hace una recopilación de pruebas y de contratos en donde encontramos muchísimas irregularidades y encontramos que el capital de los bogotanos durante esa administración fue irresponsablemente manejado.

ENS: ¿Cuál fue su metodología de análisis?

NGA: Estábamos comenzando nuestra época universitaria y teníamos cierto conocimiento pero no mucho. Felipe estudia Derecho y yo Ciencias Políticas, y cada uno comenzó a preguntar en sus respectivos campos y ahí comenzamos a hacer varios derechos de peticiones.

Tengo que ser sincero: nos encontramos con muchísimas paredes, con un sistema burocrático muy complejo, y nos dimos cuenta de que los contratos y la información que debían estar a disposición de los bogotanos, de todos los colombianos y que debería ser de fácil accesibilidad, manejo y entendimiento, era todo lo contrario. Fue muy difícil.

Pero todos nuestros puntos en el libro están justificados y referenciados, como los contratos que se supone que estaban en licitación pública. En muchos casos también citamos informes de grandes medios y de auditorías de la Fiscalía.

ENS: ¿La intención general de este ejercicio es la de hacer un llamado contra la corrupción?

NGA: Nosotros, como autores y como organización, creemos que la corrupción es uno de los problemas que más ha azotado no solo a Colombia sino a América Latina y claro, el objetivo final es hacer un escrutinio público sobre los graves actos de corrupción, que es un fenómeno social que se está volviendo hábito en este país.

ENS: ¿Y con la Fundación Democracia & Libertad el objetivo es el mismo?

NGA: Nosotros con esta fundación lo que buscamos es crear un espacio en el que los jóvenes puedan ejercer un deber de investigar y de hacerle un escrutinio a las decisiones de nuestros dirigentes.

Esta fundación nació después de que la investigación estaba un poco avanzada, y nació bajo la convicción de que nosotros podíamos crear un espacio para jóvenes, en el cual podríamos no solamente hacer estos proyectos sino motivar a más jóvenes a que hagan el mismo ejercicio que nosotros hicimos.

Además porque este es un deber de la juventud. No solo con activismo de redes sociales que se queda en un comentario, sino que se traduzca en un activismo que vaya más lejos: que sea sustentado y serio como es el producto de este libro. Y si Felipe y yo pudimos hacer este libro en medio de nuestra vida universitaria y con nuestros recursos, creo que muchos jóvenes lo pueden hacer.

ENS: ¿Por qué hablar de la alcaldía de Gustavo Petro y no de, por ejemplo, la alcaldía de Samuel Moreno?

NGA: Es cierto que él está enfrentando una pena bastante considerable por temas de corrupción, pero la Corte ya falló. La investigación surtió su efecto y estaba terminando cuando decidimos arrancar con la elaboración de este libro.

Quiero que quede claro que en muchos de nuestros capítulos hay unas conexiones entre ambas alcaldías y eso nos parece muy preocupante. En el capítulo Fundaciones fantasma: ¿Auxilios de Petro a sus amigos políticos o el fondo de la campaña Colombia Humana?, rastreamos fundaciones que vienen desde Samuel Moreno, que actúan en la alcaldía de Gustavo Petro y están contratados con la alcaldía de Enrique Peñalosa.

Durante la alcaldía de Gustavo Petro varios secretarios y funcionarios de la administración quedaron inhabilitados públicamente o están enfrentando penas ante la justicia, y casi un 70% de las secretarías y los secretarios están emproblemados ante la ley.

Entonces, sí había mucho que investigar en esta administración, había muchas irregularidades en las que podíamos profundizar y queríamos que la gente viera que esta alcaldía le hizo un detrimento a la ciudad bastante significativo.

ENS: Hay un capítulo titulado “Para la familia Petro no hay reserva natural que valga”, basado en las investigaciones del periodista Daniel Coronel en la revista Semana. En plena coyuntura electoral, ¿cuál es el sentido y la finalidad de este análisis en particular?

NGA: Hay que recordar que una de las banderas clave en la campaña de Gustavo Petro era la protección al medio ambiente, a los humedales. Él en un trino, que también se menciona en ese capítulo, respalda esa posición.

A partir de eso nosotros comenzamos a investigar que la esposa del señor Gustavo Petro, la familia de apellido Alcocer, tiene dos grandes empresas: Praga Servicios Inmobiliarios y Constructora de los Alcocer si no estoy mal. Comenzamos a averiguar que había unas denuncias de un proyecto de 94 apartamentos, que fue construido 250 metros dentro de la reserva de La Conejera. Un proyecto construido por las dos empresas de los cuñados del señor Petro.

Entonces nos preguntamos: frente a la posición del entonces Alcalde, ¿por qué se permite hacer un edificio de cinco torres con 94 apartamentos de vivienda de interés social?, ¿en dónde estaban las entidades de control? Una de ellas es el Acueducto (porque hay humedales), que en aquel entonces estaba siendo gerenciado por un cuñado de Petro, y el curador que le dio la licencia había sido designado por el alcalde encargado Guillermo Alfonso Jaramillo, íntimo amigo del Mandatario.

ENS: Este libro se circunscribe a los cuatro años de la Alcaldía de Gustavo Petro. Pero esta no es la primera Administración en donde hubo falta de rigor administrativo y hechos de corrupción, ¿usted invitaría a que esto se haga con cualquier administración?

NGA: Claro que sí. Nuestro objetivo es ese: hacer investigación objetiva y denunciar el mal manejo de los recursos de los colombianos. Esto no es de índole político sino de mala gestión, de falta de preparación, de irresponsabilidad y el mero hecho criminal de robarse el dinero de los colombianos, que no debería permitirse.