Una decisión sobre las objeciones presidenciales a la ley estatutaria de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) tomará el jueves la bancada de Cambio Radical.
Así se definió ayer durante la reunión realizada en Valledupar, donde también se habló del proyecto de ley de Modernización de las TIC, entre otras iniciativas que tramita el Congreso.
Frente a los seis puntos objetados por el presidente Iván Duque, la bancada tomó la decisión de escuchar, el jueves 28 de marzo, las posiciones del Fiscal General de la Nación y de las presidentas de la Corte Constitucional, la JEP y la Sala Penal de la Corte Suprema; así como al Procurador General de la Nación, al Defensor del Pueblo y a las ministras del Interior y de Justicia. Tras esta audiencia los congresistas fijarán su posición.
Asimismo, la bancada decidió pedir el aplazamiento del trámite del proyecto de ley de Modernización de las TIC, iniciativa que tendrá su próximo debate el martes 26 de marzo.
Plan de Desarrollo
De otra parte, ayer un primer palo en la rueda a la posible alianza entre el Cambio Radical y el Partido Liberal surgió con la aprobación del Plan Nacional de Desarrollo (PND).
Como lo publicó EL NUEVO SIGLO, una de las premisas de la posible coalición Germán Vargas-César Gaviria era, justamente, unir esfuerzos para no aprobar el PND ni las objeciones presidenciales a la JEP.
Sin embargo, al encuentro que convocó el ex vicepresidente con sus bancadas de Cámara y Senado en Valledupar para analizar las prioridades de la colectividad no asistieron algunos de sus alfiles.
Es así que mientras en la Costa norte se hablaba de las elecciones de octubre y la agenda legislativa de Cambio Radical, en el Congreso los votos de Cambio Radical salvaron la aprobación del PND.
Según trascendió ayer en el Capitolio, esta división interna se habría concretado cuando los senadores Arturo Char, Luis Eduardo Díaz-Granados y Carlos Abraham Jiménez, así como el representante Modesto Aguilera, decidieron apoyar el Plan de Desarrollo del gobierno Duque.
“Esto es importantísimo, es la apuesta de nuestro país, del Gobierno y del Presidente, en quien tenemos fijadas nuestras esperanzas y las esperanzas de muchísimos colombianos, y en el caso nuestro, de la región Caribe”, explicó el senador Char para justificar su decisión.
Conocida la noticia de la aprobación del PND, se dice que Vargas Lleras montó en cólera pues su orden había sido no votar esa iniciativa, lo que evidenciaría una grave fisura no solo al interior de Cambio Radical, sino entre esta colectividad y la familia Char, una de las casas políticas más influyentes del país y de la costa Atlántica.
Desde la capital del Cesar, el senador Richard Aguilar lamentó la decisión de sus compañeros de bancada. “Esto es muy lamentable porque el partido había tomado la decisión de no acompañar el PND. Creo que la ‘mermelada’ se infiltró en Cambio Radical”, dijo el congresista, y no descartó que desde la Dirección de la colectividad puedan presentarse sanciones a los cuatro ‘disidentes’, pues ese partido se declaró independiente del gobierno Duque.
Presidencia de la Cámara
El malestar en Cambio Radical se hará más evidente el jueves cuando la bancada tendrá que decidir el nombre de quien ocupará la Presidencia de la Cámara de Representantes, pues los acuerdos políticos indican que a esa casa política le corresponde ocuparla en el segundo año de este Congreso.
La dificultad estará en qué tanto va a pesar en la colectividad lo sucedido con los votos a favor de la familia Char en favor del PND, y si Vargas Lleras mantiene su poder de convocatoria y las riendas del partido para imponer a su candidato.
Así, en medio de ese panorama, se espera que en los próximos días se cumpla un nuevo encuentro entre Vargas y Gaviria para concretar la coalición legislativa y electoral, a la que se podría sumar un sector del Partido de La U.
Si bien esta colectividad se declaró gobiernista, se sabe que internamente hay una fuerte división pues no todos estuvieron de acuerdo con esa decisión.
Extraoficialmente se dice que a dicho encuentro asistiría el exministro Aurelio Iragorri, presidente de La U y otros de los ‘disidentes’ de ese partido.