Las cosas que se han ventilado públicamente en relación con el ofrecimiento de recursos provenientes del extranjero, para la campaña presidencial de Iván Duque, les ha dejado a algunos líderes uribistas la sensación que no habían sido suficiente y oportunamente informados sobre esos temas.
Por supuesto, el malestar no da pie -al menos no todavía- para considerar que existió algo turbio, pero sí para quejarse por la forma en que se supo de la inspección que hizo la Fiscalía.
Por ejemplo, la senadora María del Rosario Guerra expresó en sus redes sociales que “las campañas del Centro Democrático han sido austeras y honorables. Respetamos la decisión de la justicia de investigar al partido por la campaña a la Presidencia pero nos duele. Estamos seguros que la campaña del presidente Iván Duque se ajustó a la ley”.
El senador Ernesto Macías fue más preciso, al exponer que “confío en el buen manejo de la directora del Centro Democrático en los asuntos relacionados con donaciones y recursos del partido. Lamento que haya sido por los medios de comunicación que nos enteramos de requerimientos de la justicia para este tema”.
Como lo publicó EL NUEVO SIGLO, tras una inspección a la sede principal del Centro Democrático para verificar información financiera relacionada con los ingresos a las campañas, en especial la Presidencial del 2018, las directivas de la colectividad se mostraron abiertas a que hagan los procedimientos que se requieran.
Todo tiene que ver con un nuevo aparte divulgado de las interceptaciones hechas por las autoridades cuando aún vivía el empresario y ganadero Luis Guillermo Hernández, conocido como el ‘Ñeñe’, quien entonces era investigado en un caso de homicidio.
El fragmento que se conoció esta vez es de una conversación de la directora del Centro Democrático, Nubia Stella Martínez, y María Claudia Daza, entonces asesora del expresidente Álvaro Uribe. Daza le preguntó a Martínez “¿qué pasó con el venezolano?”, a lo que respondió: “¿Sabes cuánto nos dio? 300.000 dólares”.
A la Fiscalía, Martínez explicó que el venezolano es Oswaldo Cisneros, sobrino del fallecido Diego Cisneros, fundador de la Organización Cisneros, multinacional que maneja gran parte de las telecomunicaciones en Venezuela.
Martínez precisó que ese dinero nunca llegó a la campaña del presidente Duque. Reconoció que se pudo haber presentado una imprecisión en una conversación sobre el donativo que pudo realizar Cisneros. Y aclaró que no hubo donaciones internacionales a la colectividad, destacando que una donación representa un proceso extenso donde se realiza una auditoría para así garantizar una transparencia en la entrega de los recursos.