La próxima semana en el Congreso iniciará la discusión en las comisiones económicas del proyecto de reforma tributaria que presentó el Gobierno nacional, con una meta de recaudo de $25 billones anuales. 

La reforma fundamenta el recaudo en el impuesto de renta a los colombianos más adinerados así como por la eliminación de exenciones y otros beneficios.

A continuación algunos de los puntos que han generado más controversia y los comentarios de distintos sectores económicos y centros de estudio.

Bebidas azucaradas

La reforma tributaria crea un impuesto a las bebidas azucaradas y los productos ultraprocesados; según el Ministro “esta es una parte pequeña de la reforma, o sea, tiene un efecto, un propósito, que es la salud pública, no tiene un propósito de generar ingresos tributarios”.

Además considera que no afectará al consumidor porque “el impuesto lo paga quien lo produce o quien lo importa”, dijo.

Sin embargo, algunos gremios han llamado la atención sobre el impacto que tendría la medida en la industria y los consumidores. 

La directora ejecutiva de Procaña, Martha Betancourt, dijo que “es un insumo fundamental para renglones productivos como el de confites, panaderías y sus derivados, entre otros, razón por la cual debemos estudiar muy bien las implicaciones que tendrá en la economía y en los consumidores”.

En tanto que el director de la DIAN, Luis Carlos Reyes, sostuvo que “la idea es que lleve a los consumidores a consumir menos productos que no son saludables, y en la medida que existen sustitutos más saludables de esos productos súperprocesados y bebidas azucaradas, los consumidores no tendrían que estar pagando un impuesto adicional”.

El ministro Ocampo dijo también que “en impuestos saludables y ambientales, tenemos el impuesto al carbono, a plásticos de un solo uso, y a las bebidas azucaradas, que ha sido muy polémico. Podemos discutir cómo se modera un poco la historia en esa materia. Estamos muy por debajo de lo que propone la OMS (Organización Mundial de la Salud), que propone un impuesto de 25%”.

Impuesto ambiental

La reforma tributaria establece un impuesto al plástico de un solo uso, que explica el Gobierno es para proteger el medio ambiente.

Sin embargo, el presidente de Acoplásticos, Daniel Mitchell, señaló que “esta decisión va en contravía de las mismas metas del Gobierno nacional de erradicar el hambre, puesto que el impuesto recaerá sobre los productos empacados, es decir, sobre leche, queso, carnes, pollo, pan, galletas, frijoles, lentejas, cereales, aceites, harinas, café, sal, azúcar, panela, también las bebidas y los productos de aseo y limpieza, entre muchos más”.

Empero el Director de la DIAN subrayó que el impuesto al plástico de un solo uso no generará  "ningún costo tangible a los productos del día a día de los colombianos".

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¿Compañías tributarán más?

Contrario a lo que anunció el ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, la ANDI señaló que la reforma incrementaría los tributos a las compañías. Así lo dijo ayer el presidente de esta Asociación, Bruce Mac Master, en el Séptimo Congreso Empresarial Colombiano.

“A pesar de que al principio habíamos tenido la sensación de que no se iban a incrementar los tributos de las compañías, y de que el mismo Ministro ha dicho que eventualmente en el futuro debían bajar, creemos que esta propuesta de reforma sí tiene concentraciones en el sector empresarial”, dijo Mac Master.

Déficit fiscal

El director ejecutivo de Fedesarrollo, Luis Fernando Mejía, destacó que el proyecto de reforma acoge algunas recomendaciones como suprimir exenciones sectoriales, revisar y eliminar las zonas francas y eliminar el descuento del ICA. No obstante, llamó la atención sobre el hecho de que no se indica cuánto del recaudo que se obtenga será para atender el déficit fiscal.

“Ajustando nuestros cálculos esta reforma recaudaría cerca de 1% del PIB. No es claro cuánto sería gastado y cuánto usado para reducir el déficit. Es decir, no se sabe cuál es el tamaño del ajuste. La necesidad de cumplir con la regla fiscal implica que también es necesario incluir los efectos esperados sobre el gasto y el déficit fiscal”, dijo Mejía.

Por su lado, el ministro Ocampo señaló que requieren al menos un año para ajustarse a la regla fiscal. “Sí necesitamos un año más, es todo lo que yo creo que necesitaríamos, dependiendo de la magnitud de los recursos que logremos obtener en la reforma tributaria", dijo el funcionario.

Zonas francas

Otro de los asuntos que han causado mayor discusión en la reforma tributaria son las zonas francas, pues según el proyecto las empresas que operan en estas áreas mantendrían el beneficio de impuesto de renta a persona jurídica del 20% si cumplen una meta de exportación que establece el Gobierno. Las que no lo logren pagarán la tarifa normal establecida para este gravamen.

Para el presidente de Analdex (Asociación Nacional de Comercio Exterior), Javier Díaz, “la implementación del plan de internacionalización debe ser gradual para que las empresas que no exporten en la actualidad puedan prepararse para atender los mercados internacionales”.

Mientras que Miguel Espinosa, presidente de Fitac (Federación Colombiana de Agentes Logísticos en Comercio Internacional), dijo que “se está poniendo en riesgo la sostenibilidad de las inversiones y la certidumbre jurídica, lo cual es un dolor de cabeza permanente para el sector empresarial nacional y extranjero”.

Exportaciones de carbón y petróleo

El proyecto de reforma tributaria contempla gravar las exportaciones de petróleo y carbón que superen un umbral con un 10%. 

"La tarifa efectiva de este impuesto será proporcional al tamaño del ciclo positivo de precios y a la ganancia extraordinaria generada por este. Particularmente, este impuesto busca gravar solo la proporción del valor de las exportaciones derivada de un precio internacional que es superior al umbral definido", señala el texto de la reforma.

La medida ha despertado preocupación en las industrias petrolera y minera. El presidente de la Asociación Colombiana de Minería, Juan Camilo Nariño Alcocer, indicó que “la reforma por supuesto implica grandes retos para esta y otras industrias en el país, y también vamos a tener toda la disposición para conversar y entender un poco hacia dónde tenemos que llegar. Y dentro de la conversación democrática cómo podemos contribuir a que termine saliendo una reforma tributaria que genere equidad y justicia social para los colombianos”.

Por su lado, Luis Acosta, director de la Asociación Colombiana de Ingenieros de Petróleos (Acipet), dijo que “esto reduciría el apetito de inversión extranjera en nuestro sector, que actualmente es de US$4,400 millones en exploración y producción. A marzo del 2022, se registraron US$1,642 millones. La inversión extranjera es el reflejo de la salud de nuestra industria”.

Mientras que Carlos Cante, presidente ejecutivo de la Federación Nacional de Productores de Carbón (Fenalcarbón), dijo que “sin lugar a dudas el government take del carbón se va a incrementar de manera considerable de diversas maneras con esta propuesta de reforma, restando competitividad al carbón y los productos industriales que se exportan como el coque”.

Gasolina en zonas de frontera

El proyecto de reforma contempla eliminar los beneficios tributarios que tiene la gasolina en las zonas de frontera, lo que a juicio de alcaldes y gobernadores de esas regiones y gremios  incrementaría el valor del galón, afectando a los ciudadanos y la economía.

El texto de la reforma indica que se pretende “reevaluar la pertinencia de los beneficios económicos otorgados a las zonas de frontera con relación a los combustibles líquidos vigentes actualmente, en la medida en que el precio de venta al público de dichos bienes garantice la competitividad del país y mitigue los incentivos al contrabando”.

El alcalde de Riohacha (La Guajira), José Ramiro Bermúdez Cotes, dijo que “esto lo que significa es que en Riohacha y La Guajira vamos a tener tarifa general como en todo el país, lo que en vez de generar un efecto positivo, como lo afirma el documento, perjudicará la economía del territorio”.